Ana Delicado Palacios
La soberanía de las Islas Malvinas es, para Argentina y Reino Unido, un conflicto colonial que pervive en su presente, pero ambos países han sabido entenderse para devolverle la identidad a los soldados argentinos que combatieron en la guerra de 1982.
A través de un proyecto supervisado en 2017 por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), 115 soldados argentinos fueron identificados en el cementerio de Darwin de las Islas Malvinas. Cuatro años después, Argentina y Reino Unido acordaron exhumar una sepultura colectiva que había quedado fuera del primer plan humanitario.
Conocida como la C.1.10, esta tumba fue excluida del primer proyecto porque la lápida bajo la que yacían los restos no incluía la leyenda "soldados argentinos sólo conocidos por Dios". La losa sí recogía un nombre, el del alférez de Gendarmería Julio Sánchez, y el de otros tres soldados de la Fuerza Aérea, Héctor Aguirre, Luis Sevilla y Mario Luna, identificados con posterioridad en los trabajos de 2017.
En marzo de este año, Argentina y Reino Unido solicitaron la asistencia de la Cruz Roja para averiguar qué restos se hallan en esta fosa. Fue así que se lanzó el Plan Proyecto Humanitario 2, encabezado por el jefe de la unidad forense del CICR, el argentino Luis Fondebrider.
A propuesta del Gobierno argentino, lo acompaña la antropóloga española Mercedes Salado Puerto, del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), y el forense inglés John Clark, a sugerencia de Reino Unido.
El equipo interdisciplinario, integrado también por el coordinador del proyecto del CICR, Laurent Corbaz y dos especialistas de Estados Unidos y de Australia, llegó este lunes a Puerto Argentino y permanecerá aislado durante una semana, como parte del protocolo preventivo contra el covid-19 vigente en las islas.
"Después irán al cementerio de Darwin. Allí acondicionarán un laboratorio, como se hizo en el proyecto humanitario 1, para llevar a cabo los análisis en el lugar de los restos y poder hacer las tomas de muestra ósea", cuenta a Sputnik la coordinadora de la unidad de casos del EAAF, Virginia Urquizu.
INCERTEZAS
La delegación no sabe a ciencia cierta qué se encontrará en esta sepultura. La sospecha es que en esta fosa fueron enterrados los cuerpos de cuatro gendarmes que viajaban en un Helicóptero Puma del Ejército y que fue derribado el 30 mayo de 1982 en el Monte Kent de la Isla Soledad, la de mayor superficie del archipiélago.
"Fueron seis las bajas cuando cayó derribado este helicóptero, pero dos personas fueron identificadas en su momento, así que esperamos encontrar con los restos de los otros cuatro", plantea Urquizu.
El equipo de científicos también desconoce lo que podrá encontrar al abrir el nicho. "No sabemos en qué condiciones están los restos, teniendo en cuenta que probablemente estén fragmentados debido al incendio parcial que sufrió el helicóptero, así que el trabajo esta vez es un poco mas complejo", cuenta la coordinadora del EAAF.
Es imposible determinar, por lo tanto, cuánto demandarán las tareas de exhumación. "Los trabajos van a depender de en qué estado de conservación estén los restos, si están mezclados o juntos", advierte Urquizu. "No es lo mismo trabajar así que con restos casi completos, como en el proyecto humanitario 1. Por entonces sabíamos que teníamos una sepultura y que los restos estaban en varias bolsas. Entonces se hacía el análisis y en el mismo día los restos se colocaban en un ataúd y eran inhumados".
La misión enviada a las Islas Malvinas espera haber terminado con su trabajo para finales de octubre o principios de noviembre. Para entonces las muestras se habrían enviado al laboratorio genético del EAAF en la ciudad de Córdoba (centro) y los familiares podrían conocer los primeros resultados.
INFORMES
Los dos países intervinientes también recibirán sus respectivos informes. "El documento que realiza el CICR y que se entrega a los Estados es un informe integrado en el que no solo se muestra los resultados genéticos de los perfiles de las muestras óseas", detalla Urquizu. También se da cuenta de los diferentes tipos de traumas que aparecen, del análisis antropológico de las muestras, la edad, la estatura, y también la ficha odontológica".
Durante el primer proyecto humanitario, entre el 18 de junio y el 5 de agosto de 2017, fueron exhumados 122 cuerpos de 121 sepulturas en las que rezaba la placa "Soldado argentino solo conocido por Dios".
El CICR pudo cotejar en un principio los restos hallados con el perfil genético de 107 familias, de las cuales 87 arrojaron coincidencias.
Con el paso de los meses, los expertos forenses lograron identificar a otros 28 soldados fallecidos y notificar a sus familias el hallazgo.
Las Islas Malvinas están ocupadas por Reino Unido desde 1833.
Buenos Aires y Londres mantienen desde entonces un litigio por la soberanía del archipiélago, lo que llevó a que, en abril de 1982, la Junta Militar del general Leopoldo Galtieri (1981-1982) intentara recuperarlo a través de una ofensiva contra el Reino Unido de Margaret Thatcher (1979-1990).
La guerra culminó el 14 de junio con la derrota del país sudamericano y con casi 1.000 muertos entre ambos bandos solo durante el conflicto armado.
De los 649 combatientes argentinos que murieron en el enfrentamiento con Reino Unido, 237 están enterrados en el cementerio Darwin.
Ambos países retomaron sus relaciones diplomáticas en febrero de 1990, durante la administración del entonces presidente argentino Carlos Menem (1989-1999).
Con información de Sputnik