Estados Unidos y el Reino Unido ayudaron a Australia a importar submarinos atómicos sin tener el estatus de potencia nuclear, lo cual podría incitar a otros Estados a seguir su ejemplo y tendría consecuencias negativas, declaró este lunes la portavoz de la Cancillería china, Hua Chunying.
China quiere volver a recordar a todos los países que la política de doble rasero que aplican Estados Unidos, el Reino Unido y Australia es muy perjudicial para el asunto de no proliferación nuclear, dijo la diplomática en una sesión informativa para los medios.
"EE. UU. y el Reino Unido pusieron su interés geopolítico por encima de las reglas internacionales de no proliferación nuclear, al ayudar a Australia a convertirse en el primer Estado que no posee arma nuclear, pero podrá importar submarinos atómicos. Eso podría estimular a otros países no nuclearizados a seguir ese mal ejemplo, lo cual provocaría consecuencias negativas de largo alcance en la solución de los problemas regionales y de los puntos calientes", señaló.
La importación por Australia de submarinos atómicos haría daño al Tratado de la Zona Desnuclearizada del Pacífico Sur y minaría los esfuerzos de los países de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) de crear una zona desnuclearizada en la región, dijo Hua Chunying.
"China vuelve a instar a estos tres países a prestar oído a la voz de la comunidad internacional, renunciar a las obsoletas ideas de la guerra fría y del "juego de suma cero", cancelar esa decisión errónea, cumplir de modo concienzudo los compromisos asumidos en materia de no proliferación nuclear y desarrollar más esfuerzos por el mantenimiento de la paz y la estabilidad en la región", agregó.
Hua Chunying señaló que China percibe como bien fundamentada la preocupación de Rusia ante el acuerdo entre EEUU, el Reino Unido y Australia sobre la venta de tecnologías de construcción de submarinos atómicos.
El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, al comentar el llamamiento de Francia a verificar si ese acuerdo concuerda con el Tratado de No Proliferación Nuclear, dijo: "Probablemente tendríamos que solicitar que se someta al examen pericial del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) ".
Hua Chunying recordó que la exportación de submarinos atómicos a Australia supondrá la entrega de uranio altamente enriquecido y de los respectivos equipos y tecnologías.
La diplomática reconoció que en el sistema de la OIEA hay lagunas y no se garantiza de que Australia efectivamente no va a usar ese material para fabricar armas nucleares.
"China se opondrá decididamente al uso malévolo por EE. UU., el Reino Unido y Australia de la existencia de tales lagunas en el Tratado de No Proliferación Nuclear y en el OIEA y defenderá firmemente el prestigio y la eficacia del sistema internacional de no proliferación nuclear", declaró.
El 15 de septiembre, Estados Unidos, el Reino Unido y Australia anunciaron un nuevo programa en materia de defensa con el nombre de Aukus, que en la primera fase supone la construcción de ocho submarinos nucleares para el país oceánico.
Al día siguiente, el primer ministro australiano, Scott Morrison, anunció que Canberra rompe un contrato de submarinos convencionales, de casi 66.000 millones de dólares, con la francesa Naval Group, decisión que París calificó como "puñalada por la espalda".
Con información de Sputnik