El Gobierno de Bolivia anunció este martes la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel “en repudio y condena” a los ataques de ese país contra la Franja de Gaza.
“Bolivia decidió romper relaciones diplomáticas con el Estado de Israel”, dijo el vicecanciller, Freddy Mamani, citado por el medio Educación Radiofónica de Bolivia (Erbol) en su web.
De acuerdo a este medio, Mamani, junto a la ministra de Presidencia, María Nela Prada, afirmaron en una conferencia de prensa que la decisión se tomó “en repudio y condena a la agresiva y desproporcionada ofensiva militar israelí, que se realiza en la Franja de Gaza y la amenaza de la paz y la seguridad internacionales”.
Nela Prada dijo que Bolivia, “en el marco de su posición principista de respeto a la vida”, está comunicando la decisión al Gobierno de Israel.
El lunes, Arce se reunió con el embajador palestino en Bolivia, Mahmud Elawanim, a quien le expresó su solidaridad ante “el sufrimiento” de miles de sus conciudadanos, en momentos en que Israel lleva adelante una ofensiva aérea y terrestre, en respuesta a un ataque del grupo Hamás, que ha dejado miles de muertos.
El presidente dijo que rechaza “los crímenes de guerra que se cometen en Gaza” e instó al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas “a evitar que se consume el genocidio del pueblo palestino”, pero en ningún momento mencionó a Israel.
Las declaraciones del mandatario motivaron la crítica del expresidente Evo Morales (2006-2019), quien más temprano este martes cuestionó al actual Gobierno por no tomar medidas contra Israel.
“Si el gobierno no está subordinado al Imperio y es realmente solidario con el sufrimiento del pueblo palestino, ¿por qué mantienen las relaciones diplomáticas con Israel?, ¿por qué no lo declaran como Estado terrorista?, ¿por qué no presentan la denuncia ante Corte Penal Internacional?”, dijo Morales.
El pasado 7 de octubre, Hamás lanzó miles de cohetes desde la Franja de Gaza en un ataque sin precedentes y realizó una incursión armada en las zonas fronterizas del sur de Israel, ejecutando a cientos de civiles en sus casas, en las calles y en una fiesta masiva.
Además, tomaron como rehenes a unas 200 personas entre civiles y militares.
En respuesta, el Ejército israelí lanzó varias oleadas de ataques aéreos y una incursión terrestre para destruir la infraestructura de Hamás y recuperar a los rehenes.
Numerosos países llamaron a Israel y Hamás a detener las hostilidades y negociar un alto el fuego.
También se multiplican las voces a favor de una solución de dos Estados como única vía posible para lograr una paz duradera en la región.
Las hostilidades han causado hasta la fecha más de 1.400 muertos y casi 5.500 heridos en Israel, y más de 8.500 muertos y unos 21.500 heridos en la Franja de Gaza, según los últimos datos disponibles.
Sputnik, 31.10.2023