Captación de pacientes y tratamiento se realiza con enfoque de género, en el marco del Proyecto GROW
El equipo multidisciplinario del Servicio de Salud Mental del Hospital Nacional Arzobispo Loayza, culminó su capacitación en el Proyecto GROW, programa diseñado para brindar atención integral y con enfoque de género a las mujeres adictas a las drogas u otras sustancias que se atienden en este establecimiento o en los centros de salud cercanos, informó la doctora Isabel Vásquez Suyo, médico psiquiatra de este hospital.
“El problema de drogas es emergente, va en aumento. Se hace más complicado porque aparecen nuevos elementos añadidos, sin embargo la respuesta se ha dado solo desde un esquema y las experiencias que se han recopilado sobre el consumo de drogas se han hecho en su mayoría, en base al varón que sufre de adicción y no han tomado en cuenta las necesidades de las mujeres que por rol social, tienen responsabilidades y situaciones diferentes en la vida”, agregó la especialista.
El equipo de trabajo multidisciplinario del Proyecto GROW en el hospital Loayza lo conforman también la psicóloga Katia Zevallos y la enfermera Mauricia Pantoja, precisa la doctora. El equipo, comenta la licenciada Zevallos, realizó coordinaciones con los diferentes servicios de consulta externa para realizar charlas de sensibilización y actividades psicoeducativas, a fin de detectar a pacientes y/o usuarias con estos problemas para la derivación oportuna. Posteriormente se coordinará con los Servicios de Emergencia y Hospitalización, indicó.
Según la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (DEVIDA), aproximadamente 200 mil personas solo en Lima y Callao consumen drogas o alguna sustancia. Así mismo, se estima que menos del 10% de consumidoras y adictas buscan y acceden a tratamiento formal para superar el abuso de sustancias.
Adicción en las mujeres
La doctora Vásquez comentó que el rol social de la mujer influye en la forma de inicio de la adicción, dado que con frecuencia la pareja es adicta y ellas son obligadas bajo amenazas y con violencia a consumir estas sustancias. Así mismo, muchas mujeres ingresan al consumo como una forma de superar el dolor y la angustia que les genera una situación familiar desfavorable y de maltrato.
Precisó que el consumo en las mujeres suele ser escondido y a diferencia de los varones que con frecuencia se inician con bebidas alcohólicas, ellas lo hacen con el uso excesivo de ansiolíticos, dado que la venta no es controlada.
Destacó la existencia de otros elementos que están alrededor de una mujer que sufre de adicción, como el abuso físico y sexual, prostitución, presencia de estrés post traumático y también situaciones relacionadas a la familia. Este último aspecto es muy importante, pues en el caso de las mujeres, los daños físicos no solo se restringen a ellas mismas, como sucede con un varón, sino que afecta a sus hijos, en especial si está embarazada.
La especialista precisó que en nuestra sociedad se acepta con mayor facilidad que un hombre sea agresivo por haber llevado una vida difícil y de violencia (‘que se desfogue’, ‘que se descargue’). A la mujer, en cambio, se le obliga a cumplir con su rol, haciendo que ella ‘soporte’ de manera tranquila, por los hijos, por la familia y ese es un gran problema para ella. Además, refirió que el rechazo social a la mujer adicta es mucho mayor que en el caso de los varones, lo cual dificulta que la mujer acceda oportunamente a un tratamiento.
Proyecto GROW
El proyecto GROW - Desarrollando capacidades para ofrecer tratamientos por abuso de sustancias sensible al género, ha sido diseñado en Estados Unidos y es adaptable a la realidad de cada país. Esta iniciativa, dirigida a atender mujeres con problemas de adicción a drogas o sustancias, se materializó con el apoyo de la SAAL de la Embajada de los Estados Unidos en Perú. Nuestro país es el primero en recibir la capacitación e implementación, la cual está a cargo de CARE Perú, en alianza con el MINSA y DEVIDA.
En el Hospital Loayza, comenta la doctora Vásquez, los entrenadores internacionales han capacitado no solo a profesionales de esta entidad sino también a profesionales de los centros de salud que corresponden al Loayza como: Villa María del Perpetuo Socorro, San Sebastián, Conde de la Vega Baja, Chacra Colorada y al Centro de Salud Comunitario Cayetano Heredia, ya que la idea es trabajar en red para lograr una adecuada captación de casos.