Por Rocío Río de la Loza, Health Coach.
Jamie´s Food Revolution es una campaña global para provocar el debate e inspirar cambios (positivos y al largo plazo) en la forma que los niños acceden, consumen y comprenden los alimentos. El movimiento, que se celebra el próximo 20 de mayo, es impulsado por el británico Jamie Oliver, reconocido mundialmente por sus platos y personalidad divertida, pero sobre todo, por su activismo para generar conciencia con el objetivo de que las personas aprendan a tener una alimentación saludable.
Desde hace 15 años se ha entregado a la tarea de mejorar la calidad de vida de las personas, especialmente la de los niños, a través de programas de su organización sin fines de lucro, como la Jamie Oliver Food Foundation, que buscan crear conciencia sobre la calidad de los alimentos, su origen, su preparación y sus efectos sobre el cuerpo. Así como generar mejores resultados en torno a la salud pública y la educación alimentaria.
Debemos tener presente que nos encontramos en medio de una crisis global de salud. Se estima que 41 millones de niños menores de cinco años de edad tienen sobrepeso, mientras que 159 millones de niños están desnutridos y crecen en la pobreza.
Por esto, su objetivo es elevar el perfil nutricional de los alimentos. Esto lo hace mediante la reconexión a las personas con la tierra, usar la cocina para crear lazos entre familias y sus comunidades, mantener vivas las tradiciones culinarias de cada región e implementar la educación alimentaria en las escuelas.
Su mensaje no es “deja de comer esto o aquello”. Sino que simplemente busca regresar a la bondad de los ingredientes, a preparar la comida en casa y a disfrutar de ella con otras personas.
Su intención es crear estrategias que prevengan condiciones como la desnutrición, la obesidad y la diabetes tipo 2; abriendo el diálogo entre todos los actores de la sociedad: organismos públicos, instituciones privadas, la industria, asociaciones de caridad, maestros, padres de familia y demás individuos que habitan este planeta.
El movimiento Food Revolution pretende poner en la mesa temas relevantes para crear una conversación sobre ¿cómo disminuir la obesidad infantil?
En este sentido, ha formulado una propuesta para el gobierno del Reino Unido que consiste en:
•Implementar un impuesto sobre las bebidas azucaradas como los refrescos, así como se ha hecho en diferentes países. En sus •restaurantes, el precio de estas bebidas reflejan su filosofía.
•Reformular las bebidas y alimentos procesados para que contengan menores cantidades de azúcar y sean lo más saludables posibles.
•Utilizar un formato de etiquetado que sea más fácil de comprender.
•Mejorar los alimentos que se ofrecen en las escuelas. Y que la educación alimentaria sea obligatoria para alumnos y maestros.
•Regular la publicidad de alimentos altos en grasa, azúcar y sal.
•Empoderar a los padres de familia para que tomen las decisiones más saludables para sus hijos.
En el corazón de su activismo se encuentra Food Revolution Day, o el Día de la Revolución Alimentaria, que se celebra alrededor del mundo el próximo 20 de mayo. El cual es un día para exaltar la importancia de los alimentos buenos, frescos y verdaderos.
Jamie cree que el acceso a comida fresca y real, aunada a las habilidades básicas para cocinar, tiene el poder de transformar la vida de las personas. Por esto, el viernes 20 de mayo anhela inspirar a individuos de todas las edades para aprender sobre los alimentos y cómo se debe cocinarlos.
La importancia de este movimiento radica en empoderar a las personas para que puedan alimentar de una forma saludable. Esto significa generar conciencia sobre cómo aprovechar al máximo los vegetales, los carbohidratos, entre otros nutrientes que necesitamos para nuestra rutina diaria.