La ley laboral juvenil 30288 fue derogada esta tarde por el Congreso de la República por 91 votos a favor, 18 en contra y 5 abstenciones tras varias horas de sesión plenaria iniciada a las 09:00 h de hoy.
Pese a la insistencia del presidente Ollanta Humala, sus ministros y su cónyuge, quienes de forma contumaz persistían en esta norma que había sido promulgada sin recabar la opinión de las organizaciones involucradas, en una fase más de intentar enriquecer a las grandes empresas a costa de las pauperización de los jóvenes, con el pretexto de la capacitación que las empresas no están en condiciones de proporcionar.
La fenecida ley ni siquiera llegó a ver su reglamento promulgado, debido al debate público suscitado por cinco movilizaciones de 50 a 70 mil jóvenes, a los cuales en las últimas marchas se adhirieron organizaciones sindicales, vecinales, de derechos humanos y otros.
Por la mañana, miles de jóvenes se concentraron en la Plaza Dos de Mayo, desde donde intentaron avanzar por Abancay, pero esta avenida había sido cerrada.
Portando pancartas, banderas, más caras y coreando lemas contra esta ley y la prepotencia del gobierno, los manifestantes también se dieron tiempo para escuchar el debate en el Congreso.
Tras el conteo de los votos que decidió la muerte de la abusiva ley, la multitud estalló en una jubilosa celebración por su triunfo democrático, pese a los intentos del gobierno por desalentarlos, que incluyó represión y detenciones, arremetida a la cual se sumó el grupo El Comercio y sus diarios y televisión, que entraron en campaña a favor de la repudiada ley.
La mayoría de parlamentarios dejaron sin argumento a los oficialistas, cuyo sustento se cayó por deleznable, pues esta ley no iba a formalizar a las empresas ni capacitar a los jóvenes, sino entregarlos a la voracidad de las grandes empresas para aumentar sus utilidades a costa de la mutilación de los derechos e ingresos en las remuneraciones de los jóvenes.
Desde la primera parte del debate, se unieron a la derogación las bancadas fujimorista y de Perú Posible, con lo cual la mayoría ya estaba conformada, por lo cual no se decidió optar por la burla de la modificación, que se intentaba desde el gobierno.
Finalmente, el congresista de Acción Popular Yonhy Lescano propuso exonerar de una segunda votación a esta ley, lo cual también fue aceptado.
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