Tras el proceso abierto contra la procuradora de Lavado de Activos, Julia Príncipe, por haber declarado a la prensa en torno al caso de Nadine Heredia por presunto delito de lavado de activos, el ministro de Justicia, Gustavo Adrianzén es cuestionado por la oposición parlamentaria, que presentó una moción de censura contra él.
Adrianzén había asistido el martes al Congreos a responder un pliego interpelatorio por las acciones de su sector contra la procuradora Príncipe, pero sus declaraciones no fueron satisfactoraias.
El ministro habría transgredido los principios rectores que rigen la defensa jurídica del Estado y aparentemente habría incurrido en discriminación, pues cuando otro procurador declaró por un caso que vincula al Partido Aprista no habría recibido el mismo trato.
Según Adrianzén, la procuradora debía haberle pedido permiso antes de declarar a la prensa, no obstante, la oposición considera que está actuando sin objetividad ni independencia. Durante su exposición en el Congreso incluso le llegaron a decir que vaya a trabajar “cama adentro” 24 horas a Palacio para su “amita” Nadine Heredia.
