El gobierno de los Estados Unidos, a través de su Departamento de Estado, advirtió en su informe anual sobre derechos humanos que el gobierno peruano no impidió de manera efectiva los abusos ni castigó a quienes los perpetraron al reprimir las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte iniciado en diciembre de 2022.
El documento indica que la “falta de repercusiones” ante las denuncias de abusos por parte de las fuerzas del orden causan preocupación entre los ciudadanos y subrayó que hubo múltiples denuncias de muertes, torturas y tratos inhumanos.
“El gobierno no impidió de manera efectiva los abusos o castigó a quienes los cometieron”, señala el informe del Departamento de Estado, citado por RPP.
Como se sabe, la ciudadanía salió a las calles desde diciembre de 2022 para rechazar el gobierno de Boluarte.
El informe advierte que, durante este periodo de agitación social, asociaciones de periodistas en el país denunciaron un incremento en la agresión y la intimidación a los trabajadores de la prensa que cubrieron los hechos.
El informe detalla que en 2022 se registraron 303 ataques contra reporteros, el número más alto desde 2005, según cifras de la Asociación Nacional de Periodistas de Perú.
Sobre estas violaciones de derechos humanos hay abundante material fotográfico y fílmico recogido por ciudadanos y periodistas que muestran muchísimos abusos, incluso la violación del más elemental de los derechos, el derecho a la vida, con disparos al cuerpo de las fuerzas del orden contra ciudadanos que eran y otros que no eran manifestantes, entre los cuales se cuentan adolescentes.
Los balazos fueron disparados con la intención de matar, tiraron al cuerpo, a la cabeza con balas y hasta con bombas lacrimógenas, como la que causó la muerte de un ciudadano en el centro de Lima, quien se encontraba parado junto a un grupo de personas y recibió el impacto mortal de la bomba lacrimógena desde pocos metros.
En todo esto los principales impunes son Dina Boluarte y Alberto Otárola, a quien Boluarte premió por la represión mortal pasándolo de ser titular del ministerio de Defensa a jefe de Gabinete.