Deplorable la gresca que armó el congresista Alejandro Cavero en el Museo de Arte de Lima (Mali) durante un evento denominado “Discofobia”, donde el sujeto forcejeó con una asistente y le arrebató su teléfono celular, por lo que fue expulsado del local por personal de seguridad en medio de insultos de los concurrentes.
Pese a ser una persona pública, Cavero, quien es el tercer vicepresidente del Congreso alegó con todo desparpajo que el una persona lo grabó sin su consentimiento y lo insultó, por lo que él le quitó el teléfono para darselo a la seguridad.
Parece que dicho individuo no se ha enterado de que es persona pública y cualquiera puede grabarloen un lugar igualmente público. Aunque lo haya insultado, nada le da derecho para forcejear y arranchar por la fuerza el teléfono móvil aprovechando de que tiene más fuerza que una mujer.
El legislador del partido Avanza País, que con gente así debería llamarse “Retrocede País”, fue expulsado por el personal de seguridad en medio de insultos de los indignados asistentes. “¡Fuera mier...!”, “¡No haces ni mier... por el país!”, ¡”C... tu m...!”, “¿Qué m... te pasa hue...?”, “¡Eres una mier...!”, “¡Dale el celular, qué chu... te pasa, estás loco!”, “¡Eres una verguenza hue...!”, “¡Ni cag... eres bienvenido!” y finalmente todos en coro exigieron que lo expulsen diciendo: “¡Fuera mier...!” una y otra vez.
El indeseable que aceptar la expulsión con el polo roto y sin sus anteojos.
La gente tiene razón, no hace nada bueno por el país. Su único logro ha sido para sus intereses personales, como es homosexual declarado, promovió una ley para las uniones de homosexuales.
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