Réplica. Por ser un socio comercial, dice ex Presidente del Consejo de Ministros. “Compra de material bélico envía el mensaje a los demás países de no tocar sus inversiones”, advierte.
Francesca García.
Tras la autorización final del Congreso de Estados Unidos para que Chile adquiera a su país material bélico, el ex premier Carlos Ferrero calificó como una “inconsecuencia” que el país del norte —con que el Perú firmó un Tratado de Libre Comercio (TLC)— se convierta ahora en el principal proveedor de armas de nuestro vecino sureño.
“Ahí hay una contradicción. No tiene lógica que nuestro principal socio comercial sea el que paralelamente alimenta el armamentismo chileno. Nosotros le compramos y ellos nos meten bala”, dijo.
Ferrero Costa criticó además que los países desarrollados como EEUU manejen un “doble discurso”, donde por un lado instan a las naciones en vías de desarrollo a no endeudarse o vigilar su gasto, y por otro lado se enriquezcan promoviendo esta clase de compras.
“Para algunos la tesis de las cuerdas separadas se da en todos los planos, pero no es razonable que hagas una alianza comercial con un país y que este promueva el armamentismo de un vecino que claramente amenaza al Perú”, manifestó.
Inversiones chilenas
El también ex presidente del Congreso indicó que con las últimas adquisiciones y las próximas a concretarse —que convertirían a Chile en uno de los países con mayor poderío bélico en Sudamérica— este país quiere emitir un mensaje de “no tocar sus inversiones”.
“Nosotros ingenuamente les seguimos abriendo las puertas de la inversión, y mientras más dinero generen van a seguir comprando más armas”, opinó.
Ferrero advirtió que existe un vacío en el discurso iniciado hace algunos meses por el Perú, al referir que no se debe solicitar solo que los países se abstengan de comprar armas, sino que se debe demandar que las naciones más industrializadas no las vendan.
Contradicciones a la chilena
El Congreso de Estados Unidos ha autorizado la compra de 18 aviones de combate F-16 por Chile, valorizados en 270 millones de dólares. El jefe de la Fuerza Aérea Chilena, Ricardo Ortega, señaló que su país tiene capacidad de “pegar fuerte”.
El electo presidente Sebastian Piñera ha prometido revisar la Ley del Cobre, que destina el 10% de la venta de este recurso a las Fuerzas Armadas.
La República, 01.02.2010