El Ministerio de Salud (Minsa) atiende al menor M.A.P.C. (8), quien sufrió graves lesiones en su mano derecha tras manipular un pirotécnico, de tipo rata blanca, cuya venta está prohibida.

El menor ingresó por emergencia la noche del lunes al Hospital de Huaycán, donde recibió las primeras atenciones, incluyendo control de hemostasia y manejo del dolor. Debido a la gravedad de sus lesiones, fue referido al Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) San Borja para recibir atención quirúrgica y multidisciplinaria especializada.

 

pirotecnicos varios

Tras su ingreso al INSN San Borja, el menor fue intervenido en sala de operaciones por un equipo de cirujanos plásticos y traumatólogos, quienes realizaron una limpieza quirúrgica de la zona afectada y evaluaron la posibilidad de amputación de su mano derecha debido a los daños severos. Actualmente, el menor de edad se encuentra hospitalizado en el área de quemados, con un estado estable y bajo supervisión constante.

Además de la atención médica, el menor y su familia están recibiendo soporte emocional como parte del enfoque integral del tratamiento. Todo el proceso, incluyendo los costos del tratamiento y hospitalización, está siendo cubierto por el Seguro Integral de Salud (SIS).

PREVENCIÓN

El Minsa, a través del INSN San Borja, reitera su llamado a la población para prevenir incidentes como este. A pocas semanas de diciembre, ya se ha registrado el primer caso de un menor herido por pirotécnico, un producto que representa un riesgo significativo para la salud y seguridad de los niños.

Es crucial evitar la venta y el uso de pirotécnicos. Estos objetos pueden causar lesiones graves, incluyendo mutilaciones y desfiguraciones que afectan permanentemente la calidad de vida de los menores. El proceso de recuperación para un paciente quemado es largo, abarcando tratamientos médicos, quirúrgicos y psicológicos.

Desde 2014, el INSN San Borja ha liderado campañas de prevención de quemaduras, buscando reducir los casos de niños afectados por líquidos calientes, fuego, electricidad y pirotécnicos. Anualmente, el eje de quemados recibe entre 300 y 400 casos de niños con quemaduras graves, de los cuales el 2 % son ocasionados por pirotécnicos, una cifra que se incrementa notablemente durante las fiestas de fin de año.

El Minsa enfatiza la importancia de la prevención como la herramienta más efectiva para evitar estas tragedias. Así como en la coordinación con instituciones y familias para garantizar una atención de calidad a los pacientes más vulnerables.