Por Juan Sheput
Inspirado en el libro de Lawrence Harrison, El subdesarrollo es un estado de la mente, publicado en 1985, el distinguido periodista argentino Mariano Grondona escribía años después como nuestros patrones culturales, nuestro afán por aceptar folclorismos o irregularidades, era en realidad una de las condiciones vigentes en América Latina que nos condenaba a padecer estructuralmente el subdesarrollo. Es cierto que algunos países, como Uruguay, Chile y Colombia, se vienen desprendiendo de este patrón de comportamiento a diferencia de nuestro país en donde el culto por la irregularidad y por la informalidad se ejerce con entusiasmo.