Sin Directivas, la nueva normativa queda en “letra muerta”, señalan
La Asociación Nacional de Laboratorios Farmacéuticos (ALAFARPE), saludó la reciente disposición de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas, DIGEMID, de inmovilizar y retirar del mercado el jarabe contra la tos Farmabron Expectorante al presuntamente contener un insumo contaminado. Sin embargo, reconoció que este hecho pone sobre el tapete la necesidad de contar con una regulación que garantice que los medicamentos que se vendan sean de calidad, seguros y eficaces.
Augusto Rey de la Cuba, Director Ejecutivo de ALAFARPE, recordó que para ello ya existe la nueva ley de Productos Farmacéuticos, Dispositivos Médicos y Productos Sanitarios (Ley 29459), y sus reglamentos (que entraron en vigencia en enero del 2012), pero no así todas las directivas correspondientes, que son las que hacen posible la aplicación en la práctica de los mismos.
“Mientras éstas (las directivas) no se den por parte del Ministerio de Salud, a través de la DIGEMID, se continuará permitiendo que los medicamentos que consume la población no sean de calidad, seguros y eficaces, exponiéndola a graves peligros para su salud”, aseguró. “Tan importante como la farmacovigilancia y el control de calidad es el registro sanitario, que garantiza seguridad y eficacia de los medicamentos”, añadió.
Debe tenerse en cuenta que la ley anterior de productos farmacéuticos, su reglamento y el Texto Único de Procedimientos Administrativos, que aún se aplican, son laxos al permitir la inscripción del registro para la comercialización de los medicamentos con requisitos mínimos, que no garantizan su calidad, seguridad y eficacia.