Estado peruano sólo recibe 2 de cada US$100 de las ventas mineras
La minería es la actividad cuyas ventas representan el 65% del total de nuestras exportaciones, que el año 2010 alcanzaron la suma de 21mil millones de dólares; sin embargo el estado peruano solo se benefició con el 2% de todo este número.
La tributación vigente data de 1993, “Ley de promoción Minera”, promulgada en momentos que el país se sumía en una guerra interna, inflación y con precios bajos de los metales; situación totalmente diferente a lo que se vive hoy.
Esta es la causa de porqué la tributación minera es mínima e inamovible, debido a que la legislación referida a la estabilidad jurídica dice que a las empresas mineras no se les puede cobrar impuestos adicionales por un periodo de 15 años.
Estamos a 18 años de esta ley impedidos de que el estado peruano pueda cobrar adecuadamente sus tributos de la riqueza minera; muy por el contrario intereses mezquinos de grupo desde la comisión de Energía y Minas del Congreso de la República han ido sistemáticamente bloqueando y archivando toda iniciativa o proyecto de ley. Esta es una de las causas de porqué la población en general no percibe ese crecimiento económico del cual tanto se habla, pues como vemos el grueso de la economía, 65% de las exportaciones son minerales que prácticamente no pagan impuestos.
Estos reclamos tributarios escuchamos desde el año 2006, de parte del candidato nacionalista Ollanta Humala quién propuso aplicar un impuesto a las sobre ganancias mineras, propuesta copiada por su entonces rival Alan García del APRA; pero llegado al gobierno no cumplió con su promesa, ante tanta exigencia sólo se llevó a la firma de un acuerdo con las compañías mineras para establecer un Aporte Voluntario (óbolo), que como sabemos fue una burla al país, pues no tiene carácter obligatorio.
Hoy 5 años después los peruanos celebramos elecciones presidenciales; y nuevamente tienen por propuesta el candidato de Gana Perú aplicar el ansiado impuesto a las sobre ganancias mineras para de esta forma tener una mejor distribución de la riqueza y así el crecimiento económico se haga sentir en la población; casualmente otra vez la rival de ahora Keiko Fujimori, también en este último tramo de la campaña a copiado esta propuesta del nacionalismo; sin embargo la población tiene fresco el recuerdo del incumplimiento de Alan García, además de las razones adicionales que hacen dudar sobre su propuesta de Keiko, entre ellas:
1.° Que dicha propuesta de cobrar impuestos a las sobre ganancias mineras no figura en su plan de gobierno del fujimorismo 2011.
2.° Fue justamente su bancada en el Congreso, la que presidió la comisión de Energía y Minas, desde donde pudieron haber planteado un impuesto.- no lo hicieron; muy por el contrario fue desde esta comisión que bloquearon toda iniciativa de cobrar impuestos a la minería.
3.° Porque fueron 8 los candidatos al congreso de las elecciones del 10 de abril, que pertenecen a su partido Fuerza 2011 y forman parte de la ONG Reflexión Democrática, afín a la minera Yanacocha.
La biblia dice “por tus hechos te conoceréis”, y como vimos no tienen ni una muestra de estar a favor de la aplicación tributaria, lo que indica que solo se trata de un afán oportunista y electorero nada más.
Este 5 de junio los peruanos tomarán una decisión importante para el futuro del Perú, sobre quien es la persona que conviene para el país como nación, que puede dar paz social, mantener el crecimiento y sentarse a negociar con estas empresas y así llegar a un impuesto justo que haga que el crecimiento se sienta también en la población peruana; y no simples dadivas para comprar los votos de la población más vulnerable, a través de engaños.
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