La tributación se vuelve cada vez más regresiva
Por Humberto Campodónico
A medida que se profundiza la recesión internacional y se traslada su impacto al mercado interno, comienzan a notarse significativos cambios en los tributos internos que recauda la Sunat: la tributación disminuye y se modifica la estructura tributaria.
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En el I Trimestre del 2009 el total recaudado por tributos internos cae en 3.7% con respecto al 2008 en términos corrientes (1). Lo que más baja es el Impuesto a la Renta (IR), 17.7%, como consecuencia, fundamentalmente, de la impresionante caída de 65% en minería, seguida del 25% en hidrocarburos. Sin embargo, el sector manufactura aumenta su tributación en 12.9% y también lo hace el IR de cuarta y quinta categoría.
Así, si bien en el 2008 la tributación minera era 3 veces superior a la manufactura, en el I T del 2009 la cosa es al revés: la manufactura tributa más que la minería (las cifras incluyen la regularización del IR del mes de marzo).
La recaudación por IGV también aumentó en el I T del 2008 en 4.5% en términos corrientes, debido exclusivamente al IGV interno (14.2%), pues el IGV que pagan los productos importados bajó 6.7%, debido a la caída del precio del petróleo importado. Hay que agregar que, a pesar del aumento, es notoria la gran evasión del IGV, lo que hace poco recordó la Sunat con respecto a las tarjetas de crédito de consumo.
También bajan los impuestos selectivos al consumo (ISC, a las gasolinas, cigarrillos y licores), de un lado por la baja del petróleo y, de otro, porque el gobierno disminuyó el ISC a los combustibles. También ha bajado el ISC a los cigarrillos y licores, lo que podría indicar que los consumidores “ahorran” dejando de comprar estos productos.
El otro cambio es que la estructura tributaria se ha vuelto más regresiva de lo que ya era porque ha aumentado el peso de los impuestos indirectos. En efecto, en el 1 T del 2008, la recaudación por IGV e ISC representaba el 60.2% (52.7+7.5) del total de tributos internos, lo que ha aumentado a 63.5% (57.2+6.3) en el 1 T del 2009. Lo contrario ha sucedido con el IR, que baja de 31.4% a 26.8% en el mismo periodo.
O sea que el presupuesto se financia cada vez más con los impuestos que pagan todos los peruanos (indirectos) y cada vez menos con los impuestos directos que gravan a las empresas y personas. En los países de la OCDE sucede lo contrario: el peso en el total de impuestos recaudados que tienen los impuestos directos a las personas y empresas es el 35%, mientras que el IGV y los selectivos son el 30%.
Lo peor es que vamos a seguir con una recaudación tributaria del 15% del PBI, que es una de las más bajas de América Latina (donde se recauda 18% del PBI en promedio). No se cumple con lo que dice el Acuerdo Nacional: la recaudación debiera aumentar progresivamente hasta llegar al 18% del PBI porque el gobierno no quiso hacer la reforma tributaria para que paguen más los que más tienen. Estas son las consecuencias.
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(1) En términos reales, es decir, considerando la inflación, la recaudación consignada por la Sunat es bastante menor: -8.9%.
(1) En términos reales, es decir, considerando la inflación, la recaudación consignada por la Sunat es bastante menor: -8.9%.
Todos los artículos del autor pueden ser leídos en: www.cristaldemira.com
Así, si bien en el 2008 la tributación minera era 3 veces superior a la manufactura, en el I T del 2009 la cosa es al revés: la manufactura tributa más que la minería (las cifras incluyen la regularización del IR del mes de marzo).
La recaudación por IGV también aumentó en el I T del 2008 en 4.5% en términos corrientes, debido exclusivamente al IGV interno (14.2%), pues el IGV que pagan los productos importados bajó 6.7%, debido a la caída del precio del petróleo importado. Hay que agregar que, a pesar del aumento, es notoria la gran evasión del IGV, lo que hace poco recordó la Sunat con respecto a las tarjetas de crédito de consumo.
También bajan los impuestos selectivos al consumo (ISC, a las gasolinas, cigarrillos y licores), de un lado por la baja del petróleo y, de otro, porque el gobierno disminuyó el ISC a los combustibles. También ha bajado el ISC a los cigarrillos y licores, lo que podría indicar que los consumidores “ahorran” dejando de comprar estos productos.
El otro cambio es que la estructura tributaria se ha vuelto más regresiva de lo que ya era porque ha aumentado el peso de los impuestos indirectos. En efecto, en el 1 T del 2008, la recaudación por IGV e ISC representaba el 60.2% (52.7+7.5) del total de tributos internos, lo que ha aumentado a 63.5% (57.2+6.3) en el 1 T del 2009. Lo contrario ha sucedido con el IR, que baja de 31.4% a 26.8% en el mismo periodo.
O sea que el presupuesto se financia cada vez más con los impuestos que pagan todos los peruanos (indirectos) y cada vez menos con los impuestos directos que gravan a las empresas y personas. En los países de la OCDE sucede lo contrario: el peso en el total de impuestos recaudados que tienen los impuestos directos a las personas y empresas es el 35%, mientras que el IGV y los selectivos son el 30%.
Lo peor es que vamos a seguir con una recaudación tributaria del 15% del PBI, que es una de las más bajas de América Latina (donde se recauda 18% del PBI en promedio). No se cumple con lo que dice el Acuerdo Nacional: la recaudación debiera aumentar progresivamente hasta llegar al 18% del PBI porque el gobierno no quiso hacer la reforma tributaria para que paguen más los que más tienen. Estas son las consecuencias.
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(1) En términos reales, es decir, considerando la inflación, la recaudación consignada por la Sunat es bastante menor: -8.9%.
(1) En términos reales, es decir, considerando la inflación, la recaudación consignada por la Sunat es bastante menor: -8.9%.
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