Alan Fairlie Reinoso
El BID ha publicado, recientemente, un documento titulado BIDEconomics Perú: Oportunidades para la recuperación y desarrollo sostenible[1], que aborda diferentes propuestas sobre las cuales nuestro país puede actuar para retomar la senda del crecimiento y desarrollo. A continuación se resumen ideas centrales del documento.
Promoción de la productividad como motor de crecimiento y desarrollo
En principio, se resalta que el Perú aún presenta problemas que limitan la promoción de la productividad. En el ámbito laboral, el país se caracteriza por altas tasas de informalidad y, adicionalmente, el COVID-19 ha tendido a afectar negativamente a la participación de las mujeres, minorías indígenas y migrantes, lo que ha implicado una reducción en el empleo por parte de grupos poblacionales vulnerables. Por otro lado, el país presenta una limitada promoción empresarial, la educación superior aún presenta dificultades, y se mantienen aún grandes brechas de infraestructura y TIC. En este sentido, estos factores dificultan el adecuado funcionamiento del mercado y limita las potenciales ganancias en productividad que se podrían tener.
Por lo tanto, el BID propone que las medidas que se deben priorizar para subsanar este problema deben estar orientadas sobre los siguientes aspectos:
• Medidas de protección en el corto plazo para proteger el empleo, y en el mediano y largo plazo priorizar las políticas orientadas a reducir la informalidad y avanzar sobre la seguridad social.
• Es importante también potenciar la capacidad empresarial peruana, un aspecto que debe ir más allá de la formalización, y debe incluir tanto financiamiento, promoción de innovación, a través de las instituciones competentes, y la formación de capital humano.
• Otro eje importante es el relacionado a la educación superior y ello debe incluir el acelerar la implementación de la Ley Universitaria, expandir la oferta de programas en PRONABEC, así como brindar más información a los jóvenes sobre las carreras por estudiar.
• El cierre de brechas de infraestructura debe priorizarse, sobre todo en infraestructura vial que permite la conectividad entre los mercados, así como la brecha digital con la expansión de conexiones de internet por todo el territorio nacional.
Promoción de una recuperación verde, sustentable e inclusiva
Otro aspecto importante es que se ha presentados pocos avances en términos de un desarrollo sostenible, sustentable e inclusivo. Sobre ello, se menciona que, si bien se ha logrado un incremento de la productividad del sector primario en los últimos años, este aún tiene un valor bajo a comparación de otros países de ingresos medios y de la región latinoamericana. Por otro lado, también se menciona que, dentro de sectores como el agrícola, aún coexisten grandes empresarios con pequeños productores, lo cual evidencia problemas tanto en la formalización como en la emisión de títulos de propiedad y financiamiento. Adicionalmente, otro sector que también convive con la informalidad es la minería, y se resalta los problemas de contaminación y degradación ambiental, así como la vulnerabilidad que el país tiene ante desastres naturales y el cambio climático.
Sobre estos ejes, se proponen las siguientes acciones para lograr avances y mejoras sobre los problemas antes mencionados:
• Impulsar la productividad y sostenibilidad agraria, a través de la provisión de bienes, así como infraestructura y financiamiento.
• Implementar un plan de mitigación de la minería informal, así como promover espacios de participación ciudadana y proponer medidas para mitigar el impacto sobre estas prácticas en el ambiente.
• Reforzar la gestión ambiental e impulsar la coordinación entre las instituciones competentes como la OEFA y MINAM.
• Implementar estrategias de descarbonización a todo nivel de gobierno e integrar el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático.
• Movilizar recursos a través de la estructuración de bonos verdes soberanos y temáticos para financiar inversiones sostenibles y resilientes y la adopción de energías renovables.
• Mejorar la gestión del riesgo de desastres a partir la gobernabilidad del SINAGRD y la Red Nacional de Alerta Temprana (RNAT) y el establecimiento de los Sistemas de Alerta Temprana (SAT).
Fortalecimiento Institucional
Un último aspecto que se resalta en el estudio es la necesidad de promover un fortalecimiento institucional para un gobierno más eficiente, dado que ello ha estado directamente relacionado con los logros que se han alcanzado en la reducción de la desnutrición crónica, la mejor de la educación básica, la cobertura en salud, entre otros aspectos. Sin embargo, también persisten algunas falencias que son necesarias de afrontar como la gestión educativa en términos de preparación docente, provisión de materiales de enseñanza y la cobertura educativa a través de la enseñanza a distancia en el contexto del COVID-19. Adicionalmente, la recaudación tributaria es limitada y aún persisten problemas sobre la eficiencia del gasto público, entre otros.
Las propuestas del BID están orientadas a priorizar la provisión de los servicios básicos (educación, salud, agua y saneamiento) en la agenda del gobierno, así como también promover acciones para mejorar la capacidad recaudatoria y la eficiencia del gasto público.
Son propuestas plausibles, que deberían discutirse para su implementación en el país.
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[1] Disponible en: https://publications.iadb.org/es/bideconomics-peru-oportunidades-para-la-recuperacion-y-el-crecimiento-sostenible-y-resiliente
