El tren Madrid-Yiwu circula a medio gas
La línea férrea más larga del mundo trae toneladas de productos de China, pero no consigue llenarse en el viaje de vuelta
Un tren de mercancías procedente de Yiwu llega en diciembre de 2014 a Madrid. JULIÁN ROJAS
Un piscolabis, la asistencia Sheng Qiuping, alto representante del partido comunista llegado desde Yiwu y la creación de una fundación. Las autoridades chinas no han escatimado esfuerzos esta semana en Madrid para impulsar el proyecto del tren más largo del mundo que nació con grandes alharacas hace casi año y medio pero que por parte del empresariado español no acaba de arrancar. La línea, de 13.000 kilómetros une Madrid con Yiwu, el gran supermercado del mundo de donde salen los productos que surten a los bazares chinos de medio mundo y pretende servir de alternativa terrestre al barco. Atraviesa China, Kazajistán, Rusia, Bielorrusia, Polonia, Alemania, Francia y España y traza una nueva ruta de la seda, de especial importancia estratégica para China. Fue el propio presidente en funciones, Mariano Rajoy el que durante de visita oficial a Pekín selló el acuerdo con su homólogo Xi Jinping con la idea de potenciar las exportaciones españolas.