Erradamente, Marina de Guerra del Perú considera como un "as" a Aurelio García y García
Por César Vásquez Bazán
El mismo que abandonó a Grau en Angamos. Ambicioso arribista debe ser retirado de sitio web de la MGP.
Erradamente, Marina de Guerra del Perú considera como un "as" a Aurelio García y García, el mismo que abandonó a Grau en Angamos.- Ambicioso arribista debe ser retirado de sitio web de la MGP
El sitio web de la Marina de Guerra del Perú presenta una foto incorrectamente denominada como “Los Cuatro Ases de la Marina Peruana”. Por cierto, el único as en el retrato es el Héroe Miguel Grau; las acciones navales o militares de los otros tres oficiales (Aurelio García y García, Manuel Ferreyros y Lizardo Montero) están muy lejos de constituir hazañas o proezas.
Sin duda, la presencia inmerecida más grave es la del capitán de navío Aurelio García y García. Su figura debe ser retirada del sitio web de la MGP por las siguientes razones:
1. García y García, al mando de la corbeta Unión, abandonó al Huáscar frente al enemigo chileno, rompiendo el convoy que mantenía con la nave de Grau sin que Grau, comandante de la misión, le hubiera ordenado proceder de esa manera. El hecho sucedió en la mañana del 8 de octubre de 1879, en los instantes previos al inicio del combate de Angamos.
2. García y García avaló la compra del Manco Cápac y el Atahualpa, el mayor fraude cometido en la historia de la marina peruana durante el siglo XIX. Por órdenes del organizador del negociado −Mariano Ignacio Prado− García y García fue nombrado agregado en la embajada peruana en EE. UU., con el encargo de preparar un informe sobre ambos barcos.
Era conocido que las naves compradas por Prado no eran apropiadas para satisfacer las necesidades defensivas del Perú. Ambos buques fueron diseñados para uso fluvial; no podían navegar autónomamente en el oceáno y andaban a reducida velocidad (nunca mayor a los cinco nudos). Aurelio García y García redactó el informe en el que no observó ni detuvo la adquisición hecha por el Jefe Supremo Mariano Ignacio Prado. A pesar de reconocer que las naves "carecían de toda cualidad marinera", García y García escribió en su informe que sólo era necesario efectuar "ligeros ajustes" en ambas embarcaciones. De esta manera, convalidó el gasto de dos millones de dólares de 1867 (cuyo poder adquisitivo hoy es de US$30,400,000) en "monitores" que nunca monitorearon las costas del Perú y que resultaron convertidos en las más caras "baterías flotantes" del mundo. Estos verdaderos elefantes grises tuvieron que ser remolcados desde Nueva Orleans hasta el Callao, por lo que Prado tuvo excusa para comprar tres vapores para efectuar el acarreo y cumplir tareas de transporte. La travesía duró quince meses.
3. El 16 de agosto de 1879, al mando de la corbeta Unión, García y García llegó a Punta Arenas con el objetivo de interceptar un vapor que transportaba armas para Chile. Desafortunadamente para el Perú, la misión resultó un completo fiasco pues días antes el buque Glenelg ya había pasado por ese puerto. Al ingresar a Punta Arenas, García y García ordenó izar sobre la Unión la bandera francesa y no la peruana. El supuesto as de la marina usó la triquiñuela del cambio de nacionalidad de la corbeta pues no sabía que Punta Arenas carecía de defensas de artillería.
4. Antes que ser un verdadero as de la marina peruana, García y García fue un político arribista, que abusó de su condición de oficial naval para lograr objetivos personales. Gustaba de la ostentación y el autoelogio, como lo demuestra su publicación sobre la captura del transporte chileno Rímac, acción que intenta presentar, al menos en el título de la obra, como resultante del esfuerzo único de la corbeta Unión. Olvida García y García mencionar que formaba parte de una misión conjunta con el Huáscar, operación que se encontraba al mando del comandante Miguel Grau. Debe recordarse que el Rímac sólo se rindió después de que el Huáscar le disparó un proyectil de 300 libras que pasó por sobre la proa del transporte chileno. La rendición tuvo lugar a las 10:15 a.m. del 23 de julio de 1879.
Por las razones antes señaladas, sería aconsejable que la Marina de Guerra del Perú retire de su sitio web el retrato de Aurelio García y García, quien no merece figurar allí, mucho menos al lado del Héroe Miguel Grau. Quienes sí merecen ser recordados por la MGP son el valeroso Manuel Villavicencio, el mismo que al mando de la corbeta Unión rompió el bloqueo de Arica, y los jóvenes marinos peruanos que entregaron sus vidas defendiendo Lima y el Callao de la invasión del enemigo chileno.
Portada del folleto de Aurelio García y García titulado "Caza y apresamiento del transporte de guerra chileno Rímac por la corbeta Unión el 23 de julio de 1879". Compuesto en los talleres de la Imprenta de El Comercio, fue publicado en Lima, en 1879. El panfleto es una muestra de la tendencia al autoelogio demostrada por García y García. Intenta presentar la captura del Rímac como resultado de la acción de la Unión y no como consecuencia de la acción conjunta del Huáscar y la corbeta, operación al mando de Miguel Grau.
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