Lourdes Gómez
 
London, 30 abr (Sputnik) .- El equipo de Julian Assange denuncia la "persecución política" del cofundador de WikiLeaks y, en un encuentro con medios extranjeros, reclama la libertad del activista y editor australiano en vísperas del Dia Mundial de la Libertad de Prensa, que este año hace hincapié en la "información como un bien común".
 
 

Assange detenido Londres

 

 
La abogada Jennifer Robinson recordó que su cliente y compatriota australiano lleva casi once años de "libertad restringida" y más de dos encerrado en la cárcel de máxima seguridad de Belmarsh, al sureste de Londres, aguardando el desenlace del procedimiento de extradición a Estados Unidos.
 
El proceso está ahora pendiente de la respuesta del Alto Tribunal de Inglaterra y Gales a la petición estadounidense, revalidada por la administración del presidente Joe Biden, para recurrir la sentencia en contra de la entrega de Assange, que emitió la Corte de Magistrados de Westminster el 4 de enero.
 
RECURSO DE APELACIÓN
 
La campaña de presión crece día a día en un último esfuerzo para que el abogado general designado por Biden, Merrick Garland, archive el polémico caso. De otra forma, los jueces británicos darán su anticipada venia al recurso de apelación interpuesto por EEUU. La vista judicial al respecto se espera "muy pronto", según indicó a Sputnik la letrada de Assange.
 
"Nos inquieta mucho su continua detención, que consideramos desproporcionada", denunció Robinson en conferencia audiovisual con miembros de la Asociación de Prensa Extranjera en Londres (FPA, en sus siglas en ingles). La especialista en Derechos Humanos, que lleva una década luchando por la libertad de Assange, advirtió que el exdirector de WikiLeaks "se enfrenta a 175 años en prisión por publicaciones de 2010-2011, con las que ha ganado premios periodísticos alrededor del mundo y por las que ha sido nominado al Nobel de la Paz".
 
En el encuentro mediático también participaron Kristinn Hrafnsson, quien conduce el timón de la plataforma pionera en difusión de documentos oficiales, y Chamira Gamage, de Amnistía Internacional en Sidney. "La persecución de Julian es una "vendetta" del imperio. No hay duda de que esa es la causa subyacente. Son actos vindicativos del imperio contra un periodista que es responsable de hacer un bien público exponiendo atrocidades", denunció el director de WikiLeaks.
 
PERSECUCIÓN POLÍTICA
 
Assange, según Hrafnsson, es víctima de una "persecución política". "Le persiguen por hacer periodismo, por exponer crímenes de guerra, y mientras siga preso en Londres, ningún periodista extranjero estará a salvo en Reino Unido", alertó.
 
Durante el juicio de extradición, que transcurrió en dos etapas distintivas en 2020, trascendió la intención de Washington de negar a Assange las garantías constitucionales por ser extranjero. Por tanto, de ser juzgado en EE. UU. por los cargos de espionaje detallados en la orden de extradición, el fundador de WikiLeaks no podrá ampararse en el principio de libertad de prensa, ni justificar en el interés público la divulgación de miles de documentos confidenciales de ficheros del presidio de Guantánamo, diarios de las guerras de Afganistán e Irak, cables diplomáticos y otros informes que desvelaron aparentes abusos de poder de las autoridades estadounidenses.
 
NAVALNI Y ASSANGE
 
Kristinn Hrafnsson hizo un paralelismo entre la situación de Assange y la del opositor ruso Alexéi Navalni. "Retener en la cárcel a Julian socava la capacidad del Reino Unido para alzarse en defensor de la libertad de prensa y arriesga el esfuerzo de otros gobiernos para respetar la libertad de expresión", dijo en la videoconferencia.
 
El director de WikiLeaks y periodista de investigación considera que Rusia aventaja a Reino Unido en acceso y transparencia del procedimiento judicial. "Vimos a Navalni en el juicio, quien pudo hablar durante la audiencia, mientras que a Julian no le permitieron hablar y los observadores tuvieron muchas dificultades para supervisar el proceso", comparó.
 
La familia, los abogados y compañeros de Assange afrontan con optimismo la etapa judicial que está a punto de reanudarse públicamente. "Soy una persona positiva y creo que la justicia prevalecerá finalmente", dijo el periodista islandés. Gamage presiente que hay voluntad para dar el impulso definitivo a la campaña que avergüence y fuerce a los gobiernos a actuar. "Siempre he creído que será libre", suspiró, a su vez, Robinson, "pero llevamos más de una década y no debería demorarse muchos más". (Sputnik)