Industrias sucias y grupos de presión

Por María José Atiénzar (*)

Todos tenemos parte en el cambio climático con el uso excesivo del automóvil, o del aire acondicionado y las calefacciones, por ejemplo. Pero nuestra responsabilidad es de un calibre muy diferente a la de empresas que ganan miles de millones de dólares con ello.

Soldados con enfermedad mental

Por Carlos A. Miguélez Monroy (*)

En cinco años, el soldado Matthew Sepil pasó de ‘liberador’ a preso. Cuando las pesadillas y los recuerdos no lo dejaban dormir una noche, se dirigió al supermercado de su barrio para comprar alcohol. Dos jóvenes de una banda organizada se le cruzaron en el camino. Cuando creyó ver el brillo de una pistola y escuchar una explosión, desenfundó el Kalashnikov que siempre lo acompañaba desde su regreso. Un muerto y un herido grave.

Midiendo la paz

Por Alberto Piris (*)

Un investigador para la paz que desee medir la eficacia de sus instrumentos (mediación, diálogo entre las partes, justicia para todos, equidad en el reparto de recursos, etc.) para resolver conflictos carece de unidades de medida que le faciliten la solución del problema. A veces, ni siquiera sabe qué se entiende por paz, ni cómo comparar la gravedad de los conflictos en términos que todos puedan entender, aunque sólo sea como la escala Ritcher que mide la energía liberada por los terremotos.

Suiza: La dignidad de las plantas

Lobbies de investigación transgénica ridiculizan a los suizos

La Comisión Ética Federal para Biotecnología en el Campo no Humano (CENH), de Suiza, publicó el mes pasado un informe sobre la dignidad de las criaturas en el reino vegetal, el cual ha sido incomprendido por científicos de otros países y ha recibido comentarios despectivos, incluyendo a la revista Nature.

La Europa que no queremos

Por Xavier Caño Tamayo (*)

Los irlandeses dijeron ‘no’ al Tratado de Lisboa, sustituto de la Constitución Europea, que fracasó en 2005. Las negativas a la Constitución y Tratado (antes Francia y Holanda, ahora Irlanda) expresan el rechazo a una construcción europea poco democrática. Los voceros de esa Europa proclaman las bondades del Tratado, pero nadie cita su carga camuflada de política económica neoliberal. El truco es análogo al de magos de teatrillo. Hablan sin parar, cuentan chistes malos, eligen a alguien como cabeza de turco de sus chanzas… Y distraen al respetable público mientras dan el cambiazo.

Las “treguas” de Hamas

Yasser Arafat

Por Adrián Mac Liman (*)

En 1994, Yasser Arafat se fijó como objetivo prioritario negociar una tregua con el Movimiento de Resistencia Islámica – Hamas. El entonces líder de la OLP y futuro Presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) estaba persuadido de que la convivencia entre las principales corrientes de la sociedad palestina sólo se podía conseguir sellando las paces con el núcleo duro de la resistencia islámica, es decir, con los detractores de los Acuerdos de Oslo y de la llamada “vergonzosa traición de Washington”.

Europa pierde los papeles

Por José Carlos García Fajardo (*)

Los inmigrantes sin papeles que sean detenidos en suelo europeo podrán pasar hasta 18 meses retenidos en centros de internamiento mientras se tramita su expulsión. Podrán ser detenidos con una mera orden administrativa y una vez expulsados no podrán volver a la Unión Europea en cinco años. Los inmigrantes menores de 18 años no acompañados podrán ser repatriados.

Paraísos para infames

Por Iván González Alonso (*)

La evasión de impuestos a nivel mundial en paraísos fiscales supera los 200 billones (no los ‘billions’ americanos) de dólares, repartidos entre más de 3 millones de sociedades, fundaciones, o particulares, según cálculos de la ONG Tax Justice Network. Esa cantidad de dinero cubriría de forma sobrada el objetivo de la ONU de reducir la pobreza a la mitad para el año 2015.