Un problema llamado Chipre
Por Adrián Mac Liman (*)
Cabe preguntarse si el provenir europeo de Turquía depende de la solución de un problema llamado Chipre. El 1 de mayo de 2004, cuando la República de Chipre ingresó en la Unión Europea, los “eurócratas” dieron un suspiro de alivio. El falso júbilo pretendía disimular su inquietud ante la posible —y muy probable— acentuación del malestar generado por la presencia de la parte griega de la isla en el “club” europeo. El sector que se hallaba bajo control turco desde 1974, la autodenominada República Turca del Norte de Chipre, no había podido participar en el proceso negociador que desembocó en la adhesión de la famosa “isla de Afrodita” a las estructuras del “concierto de las naciones democráticas”.