carina melchior

El caso de Carina Melchior, de 19 años, estremece a los daneses, pues justo cuando los doctores se aprestaban a extraer sus órganos para trasplante, la joven despertó.

 

El diagnóstico, tres días después de su ingreso al hospital, aseguraba que Carina nunca iba a salir del estado de coma y si sobrevivía iba a quedar en estado vegetativo, por lo cual su familia aceptó donar sus órganos apagando previamente la máquina que la mantenía con vida, pero menos de 24 horas después abrió los ojos y movió sus piernas.

Ahora la joven se recupera con ayuda de rehabilitación, camina, habla y hasta monta su yegua Mathilde, mientras planifica mudarse a su propio departamento y ser diseñadora gráfica, informa el diario danés Ekstra Bladet.

La paciente había quedado en ese estado tras un accidente automovilístico y ahora los padres enjuiciarán al hospital de Aarhaus por el daño y gran t rauma que les causaron.

Los padres creen que los médicos querían un donante de órganos.

El Gobierno danés se encuentra preparando nuevos lineamientos para evitar que los médicos extraigan órganos antes de declarar clínicamente muerto a un paciente, pero los expertos aseguran que las preparaciones antes de declarar la muerte cerebral son vitales para establecer las compatibilidades entre donantes y receptores.

En tanto, médicos del mencionado hospital señalan que la joven nunca fue declarada con muerte cerebral y que hubo una mala comunicación con los padres, pues no se alistaban a extraer sus órganos, sino que fue una conversación en caso ocurra la muerte cerebral.

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