Pueden padecer anemia, dolores de estómago, diarrea y alteraciones en el sistema nervioso. Madres solo deben ingerir medicamentos bajo prescripción médica
La salud de los bebés puede estar en peligro si las madres que dan de lactar recurren a la automedicación, lo que podría generar alteraciones el proceso de crecimiento del bebé debido a que podrían transmitirle el contenido de los medicamentos a sus hijos o hijas a través de la leche materna, advirtieron especialistas de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid) del Ministerio de Salud (Minsa).
“Por ningún motivo las madres que dan de lactar deben automedicarse porque a través de la leche materna podrían exponer a sus hijos a la toxicidad de los fármacos, los que podrían afectar el sistema nervioso, alterar el crecimiento de los huesos, generar anemia severa, diarreas, dolores de estómago, sueño excesivo, irritabilidad, decoloración de los dientes y hasta cambiar el sabor de la leche y originar rechazo en el lactante”, señaló el jefe del Equipo de Atención Farmacéutica de la Digemid, Aldo Álvarez Risco.
Detalló que existen fármacos que están contraindicados con la lactancia porque se ha comprobado que registran efectos secundarios en el bebé; otros que deben utilizarse con precaución, evaluando si es necesario interrumpir la lactancia durante el periodo de tratamiento y si los beneficios de la leche materna compensan los riesgos para el niño.
“También hay medicamentos seguros y compatibles con la lactancia, pues se administran a la madre aplicándolos sobre la piel y no se absorben ni pasan a la leche y, si lo hacen, es en cantidades mínimas”, refirió.
El especialista destacó que los efectos del uso de fármacos durante la lactancia también afectan a la madre, disminuyendo su producción de leche, lo que además perjudica al bebé.
Recomendaciones
Por tal razón, Álvarez recomendó a las madres que mientras alimenten a sus hijos con leche materna no se automediquen y que consulten a un médico en caso de sentir alguna molestia o padecer alguna enfermedad.
“Si se les ha prescrito un tratamiento, deben estar atentas a cualquier cambio en el comportamiento de su bebé y consultar a su médico de inmediato, pues podría ser necesario suspender o cambiar el medicamento. De esta manera protegerán su organismo y la salud de su bebé, contribuyendo a fortalecer sus defensas y a que su crecimiento y desarrollo sean los adecuados”, concluyó.