Mediante un juego de cifras, el ministro de Salud Óscar Ugarte, en su presentación para el Pleno del Congreso, encubrió la baja capacidad de protección de la vacuna Sinopharm contra el contagio de coronavirus COVID-19, a la vez que no pudo desmentir la veracidad del informe que señala 34.3% para la cepa de Pekín y 11% para la de Wuhan, informe por el cual hasta la ministra Violeta Bermúdez amenazó a la prensa.
¿Qué define el valor de una vacuna?
Que no engañen. Lo que importa realmente en una vacuna es su capacidad de crear anticuerpos contra una enfermedad. Así, por ejemplo si se habla de una eficacia de 92% de la vacuna Sputnik V contra el coronavirus, esto quiere decir que de cada 100 personas vacunadas 92 crearán anticuerpos contra la enfermedad.
Pero en lugar de centrarse en ese aspecto, Ugarte buscó engañar y confundir a la gente hablando de lo que pasaría con las personas que se contagien, cuando no es ese el detalle principal. Lean la prensa internacional y en el caso de ninguna vacuna, como Pfizer, Moderna, Sputnik V, y otras, se refieren a cifras de contagiados ni de hospitalizados después de contagiarse de la vacuna, sino que en todas ellas señalan su eficacia, que supera el 90%. Los valores de lo que pasa con los contagiados es tan irrelevante que no se menciona o se menciona en textos de explicaciones amplias de estudios realizados, por ser información secundaria.
Para distraer sobre la inutilidad de la vacuna Sinopharm Ugarte habló de valores referidos a personas que se contagien, y se burló diciendo que la eficacia para prevenir el daño pulmonar es de 64.6 % y para evitar el avance de la enfermedad el punto que sea necesaria la hospitalización del paciente la eficacia es de 91 %. Dijo también que la eficacia para prevenir la muerte por COVID-19 es de 100 %. Lo que no dijo que esto es sobre un inmenso porcentaje de personas que se contagiarían. Es decir, son todas cifras sobre personas contagiadas después de ser vacunadas con Sinopharm.
Tampoco dijo que contagiarse de coronavirus COVID-19 es terrible incluso para las personas asintomáticas, pues los científicos advierten que incluso estas personas que se contagiaron y no presentaron síntomas, evidencian cicatrices en los pulmones al examen de imágenes.
Más atrevido fue al decir que la versión periodística sobre la supuesta eficacia reducida de las vacunas de Sinopharm “es falsa y malintencionada”, y añadió que, a partir de esa interpretación, algunos políticos se adelantaran a exigir la renuncia del presidente Francisco Sagasti.
Asimismo, con respecto al riesgo de fallecer por coronavirus, “la eficacia en proteger a la persona es de un 100%”.
“Esta es la lectura como la han explicado los investigadores a cargo y diversos miembros de la comunidad científica que opinaron y pusieron las cosas en su sitio”, dijo. Pero no dijo que lo que se busca no es que una persona no se hospitalice, sino que no se contagie.
“Han dicho que la eficacia de la vacuna es solo 34.3%, cuando eso es lo que aparece en el estudio como positividad a PCR, pero eso no es el resultado de la eficacia de una vacuna. Lo que quiere demostrar el estudio es cuánta eficacia tiene para aspectos fundamentales en la protección de la persona: respecto a desaturación, es decir, insuficiencia respiratoria, por ejemplo”, dijo Ugarte.