Durante la Misa y Te Deum por Fiestas Patrias, el arzobispo de Lima, Carlos Castillo, cuestionó la falta de empatía de los políticos frente a las demandas de la ciudadanía, en concordancia con el mensaje transmitido en enero a la presidente Dina Boluarte por el representante del Vaticano, nuncio apostólico Paolo Rocco, quien en enero dio similar mensaje.

 

Carlos Castillo tedeum 2023

 

“Parece que no se dieran cuenta de que nuestro pueblo existe, sufre y demanda cambios urgentes”. Con este mensaje, el arzobispo de Lima, monseñor Carlos Castillo, criticó a las máximas autoridades del Perú, como la presidenta Dina Boluarte y los congresistas, por no saber interpretar el descontento social de un gran sector del país.

Durante la tradicional Misa y tedeum de cada 28 de julio en la Catedral de Lima, monseñor Castillo lamentó que, según el resultado de las encuestas, existe un “grave separación” y “distanciamiento” entre la clase política y la “vida del pueblo sencillo”.

“Desde hace un año, cuando se fueron desvaneciendo muchas esperanzas por aquella estrecha ambición que no supo interpretar [en referencia al gobierno de Pedro Castillo] el sentir popular, la totalidad de las encuestas nos muestran, de modo contundente, que este desvanecimiento ha continuado”, señaló.

El arzobispo instó a las autoridades del país a abordar apropiadamente las demandas de la población y saber reconocer los errores que se han cometido en la gestión, además de pedir justicia y reparación para los deudos de los fallecidos durante las protestas registradas entre la diciembre del 2022 y enero del 2023.

“Desde mi misión, me corresponde hacer con todo respeto la invocación a las máximas autoridades del país a colocarse por unos minutos en la situación de aquellos que más sufren, afrontando cara a cara nuestros desaciertos y los graves males en que hemos incurrido, incluidas las muertes que esperan aún justicia y reparación”, clamó.

“Valoremos también los descontentos y los rechazos populares que condenan nuestros malos actos como dirigente del país y nos exigen rectificaciones claras. Superemos la indiferencia y rehabilitemos la mejor política por el bien común de la nación”, agregó.

Llamó  a la unidad para iniciar un Programa Mínimo Común, que contemple la participación de todos los sectores sociales y políticos a fin de cerrar las brechas y afrontar las necesidades y retos de la nación, amenazada por los próximos efectos del Fenómeno El Niño.

“Como Iglesia no estamos para soluciones estratégicas y tácticas, que corresponden al campo político y económico; pero no puede quedarse muda ante el relajamiento humano y ético de la patria. No puede dejar de llamar a todos a la unidad para un Programa Mínimo Común. La fe no se relaciona con lo político directamente, sino a través de educar nuestra sensibilidad humana y velar por ella, tratando de superar nuestras cegueras y mezquindades”, apuntó.

Para finalizar, el arzobispo de Lima citó el primer y segundo artículo de la Constitución de 1823, que establecía que “la nación somos todos, y ningún interés particular de personas, familia o grupo puede hacerse de nuestro patrimonio”.

“Apreciemos, valoremos y promovamos la subjetividad social popular de todos los rincones de la patria, para actuar, según el evangelio, con oportunidad, esperanza y la alegría que caracteriza al Perú de todas las sangres que todos amamos de corazón”, indicó.

El mensaje de monseñor Castillo va en la misma línea de lo señalado por monseñor Paolo Rocco Gualtieri: