Pese a que las evidencias apuntan a la responsabilidad del gobierno en las decenas de muertes de manifestantes que protestaron en diciembre de 2022 y enero 2023, la Policía sigue lanzando teorías descabelladas sobre dichas movilizaciones sociales, negando así el repudio mayoritario al Ejecutivo y el Congreso, que motivan el rechazo, que tuvo lugar también ayer en el centro de Lima.
Ahora el coronel PNP Max Anhuamán, a cargo de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote), señaló que los jóvenes que protestan contra el régimen de Boluarte fueron entrenados en Irán, y culpó de ello al dirigente antiminero Edwin Quiroga, señalándolo como reclutador.
“El radicalismo es lo que vemos. Sabemos que Edward Quiroga Vargas captó jóvenes y los envió a Irán a estudiar la religión islámica, pero da la casualidad que en el seguimiento que hacemos a los jóvenes, muchos de ellos son los que encabezan las protestas sociales en Huancavelica y algunos sitios”, declaró Anhuamán en el programa ‘Hablamos claro’ de Exitosa Noticias.
Quiroga fue detenido en agosto pasado por la PNP en las Carreteras de Combata, en el distrito de Tinta, provincia de Canchis, departamento de Cusco, cuando conducía un camión volquete de su propiedad, que llevaba 19,096 cartuchos de dinamita.
A Quiroga, cercano a Vladimir Cerrón y el expresidente Pedro Castillo, según un reportaje de Cuarto poder, se le halló 62 cajas de dinamita valorizadas en 150 mil soles. La carga estaba camuflada entre palos y planchas de triplay, por lo que fue puesto a disposición de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Canchis para ser investigado por el presunto delito contra la seguridad pública y peligro común.
La fiscal Katherine Barrionuevo, encargada del caso, dispuso se investigue el peritaje físico y químico sobre las dinamitas, y ha solicitado al Servicio de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil (Sucamec) para conocer si Quiroga tenía autorización para trasladar los explosivos.
Quiroga fue dejado en libertad por la falta de resultados de los requerimientos fiscales, aunque el proceso continuará hasta el esclarecimiento de los hechos.
Anhuamán deslizó los jóvenes habrían recibido algún tipo de instrucción de manejo de armas, pero no señaló ninguna evidencia, sólo dijo que existía esa percepción desde la Dircote. ¿Serán las afiebradas percepciones de la Dircote las que llevaron a la presidente Boluarte a decir que los manifestantes se mataron ellos mismos?
“Es un probable [dijo refiriéndose a un entrenamiento para el uso de armas]. Para eso tendría que tener evidencias. Te hablo desde el punto de vista de inteligencia. No tenemos ninguna duda de eso, pero un paso más allá es más complicado”, dijo, y agregó que realizan un seguimiento permanente de estos jóvenes entrenados en Irán, pero no identificó a ninguno por su nombre.
“No quiero dar nombres para que no se sientan ofendidos, pero los que han viajado saben lo que están haciendo y deben saber que los estamos mirando en salvaguarda del Perú y la paz mundial”, indicó.
No es la primera vez que las autoridades del régimen de Boluarte descalifican a las protestas asociando a los manifestantes con terroristas, vieja táctica empleada mucho por el fujimontesinismo. A ello se parece este coronel lanzando al aire hipótesis tremendistas, que deberían estar acompañadas de evidencias mínimas, no como lo hace Anhuamán, sin ningún asidero.