Montevideo, 13 may (Sputnik).- La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) confirmó este jueves que las finales únicas de las copas Libertadores y Sudamericana de clubes se jugarán en el estadio Centenario de Montevideo, Uruguay.
 
 

Copa libertadores

 

 
"Montevideo será la sede de las finales únicas de la Conmebol", anunció en sus redes sociales el organismo con sede en Paraguay.
 
El organismo que rige el fútbol sudamericano también confirmó las sedes para las ediciones 2022 de estos mismos certámenes: Guayaquil alojará la definición de la Libertadores y Brasilia recibirá a los finalistas de la Sudamericana.
 
La decisión fue tomada en un encuentro virtual del consejo de la Conmebol y, según dijeron en un comunicado, se basa en "la buena situación sanitaria proyectada para noviembre en Uruguay, país que planea vacunar a un alto porcentaje de su población en julio".
 
Hasta este jueves a las 16:30 GMT, Uruguay, un país de aproximadamente 3,4 millones de habitantes, llevaba aplicadas más de 2,1 millones de dosis, y tiene a más de 900.000 personas que ya recibieron dos inoculaciones, según datos del Ministerio de Salud Pública.
 
Al criterio epidemiológico "se suman las características del estadio Centenario, verdadero ícono del fútbol mundial, que permitirían la presencia de una considerable cantidad de espectadores", se adelantó el organismo.
 
"Además, las finales únicas servirán como una suerte de relanzamiento del estadio Centenario, en el marco de la candidatura sudamericana para la Copa del Mundo 2030", agrega el texto.
 
La fecha estimada para la final de la Libertadores es el sábado 6 de noviembre, mientras que la Sudamericana se definirá el 20 del mismo mes.
 
La Conmebol estuvo en el centro de las críticas en las últimas dos semanas por el criterio elegido para desarrollar partidos de fútbol en condiciones extremas, ya sea por la ola de contagios de covid-19, como por las protestas en Colombia.
 
Uno de ellos fue el partido que en la víspera empataron Junior y River de Argentina en Barranquilla, que se desarrolló con gas lacrimógeno en el campo de juego y detonaciones en las adyacencias del estadio, en el marco de protestas que se realizaban fuera del recinto exigiendo la suspensión del partido. (Sputnik)