Recordando a mi alumno Nicolai Ortiz Suárez
por Guillermo Olivera Díaz; Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Lo que más recuerdo de miles de alumnos de la cátedra universitaria que profesé en diversidades universidades del país, pero más en Villarreal, es que ¡jamás les vendí una nota! Lo mismo hice como juez penal de Lima: ¡nunca absolví al culpable por precio! No me juzgo ni venal ni prevaricador, aunque a lo que hice algunos llamen “locura” y me tilden de “loco”. En la Corte Suprema, ¡no rebajaría penas a los Colina, si las debo incrementar!