Por Erick Guerra

Si te estás preguntando cómo los préstamos personales y tarjetas de crédito afectan tus tasas de interés y pagos mensuales, cuáles son las ventajas y desventajas, y en qué se diferencian uno del otro; la información que veremos a continuación será de tu interés.

 

Tarjetas de crédito vs préstamos personales

Las tarjetas de crédito pueden ser de ayuda extrema para pagar los gastos del día a día como la gasolina o la alimentación. Te dan la libertad financiera que no puedes obtener de tu ingreso semanal. Sin embargo, las tarjetas de crédito también pueden ser difíciles de manejar si tienes problemas controlando tus gastos.

Un préstamo personal es un préstamo sin garantía con una tasa de interés incluido en pagos mensuales iguales. Para determinar si eres elegible, las compañías se fijan en tu historial crediticio. Sin embargo, ahora también existen los préstamos sin buró de crédito, que no se basan en este reporte crediticio.

Entonces, los préstamos personales son una buena opción para pagar deudas, como las deudas de tarjetas de crédito, al mismo tiempo que limitas la cantidad total de intereses que pagarás. También podrías usar los préstamos personales para hacer mejoras del hogar y compras grandes.

Tasas de interés

La gran ventaja de un préstamo personal sobre usar una tarjeta de crédito es una tasa de interés más baja. Las tasas de interés de las tarjetas de crédito típicamente varían en un rango de 15% a 20%, dependiendo tu puntaje crediticio. Un préstamo personal, por lo general, ofrece una tasa de interés de alrededor del 10%. Puede que no parezca una gran diferencia, pero un 5% puede subir rápidamente.

Un préstamo de una cantidad de $15 000, haciendo pagos mínimos durante 36 meses para pagarlo con una tasa de interés del 12.5%, resultaría en un pago de $ 3064,96 en intereses totales. Esos mismos $15 000 con una tarjeta de crédito y una tasa de interés del 18%, tomaría 240 meses para pagarlo en cuotas mínimas, costando más de $14 000 en intereses.

Algunas tarjetas de crédito ofrecerán un 0% de interés durante los primeros 30 días o 2 meses de la transferencia. Obviamente, si eres capaz de encontrar una oferta como esa, podrías ahorrarte mucho dinero en intereses. Pero, como todo lo demás, hay algunas desventajas. Para aprovecharse del bajo interés, a menudo, las compañías de tarjetas de crédito cobran una comisión por transferencia. Debes asegurarte de conocer todos los términos y condiciones antes de firmar por la transferencia de fondos.

Pagos mensuales

Debido a que un préstamo personal tiene un contrato cerrado, los pagos mínimos mensuales usualmente son más altos que los de una tarjeta de crédito. Estás pagando la deuda más rápido, lo que significa que pagarás menos en intereses. También, teniendo un plazo establecido para tu pago, quiere decir que puedes organizar tu presupuesto mensual para saber cuánto deberás destinar al pago del préstamo.

Los pagos mensuales de las tarjetas de crédito serán entre el 1% al 2% del saldo total. Mientras esto hace que las cuotas sean menores, a largo plazo, terminarás pagando mucho más en intereses. Debido a que tu saldo total puede variar con una tarjeta de crédito, los pagos mensuales también pueden hacerlo. Tu presupuesto mensual puede verse afectado por estos cambios y puede ser más difícil mantener el registro.

En conclusión, las tarjetas de crédito son de ayuda para nuestros gastos cotidianos; sin embargo, debido a sus tasas de interés más elevadas, no son ideales para financiar gastos grandes. Los préstamos personales pueden tener menor tasa de interés, pero sus cuotas de pago llegan a ser mayores.