Las redes sociales informan de un caso de discriminación perpetrado por los indeseables chilenos de PeruRail, a quienes el corrupto gobierno de Alberto Fujimori permitió obtener permiso para operar el tren Cusco-Machu Picchu.
Después de otros casos, esta vez PeruRail discriminó el 6 de febrero de este año a una mujer indígena que buscaba subir al tren con su pequeña hija: no les permitieron abordar la máquina, pese a que habían pagado sus boletosl
Constituye agravante el hecho de que al momento en que niegan el ingreso a la mujer, el tren estaba vacío.
Los cusqueños deberían echar de su región a estos desadaptados chilenos, que deberían regresar a su país con su mal servicio y malas prácticas, pues incluso el sindicato de dicha compañía ha realizado denuncias por abusos laborales.
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