Especímenes de fauna silvestre eran utilizados para tomarse fotos o como controladores biológicos sin autorización
Tras realizar una operación con la Policía Nacional del Perú (PNP), el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (MIDAGRI), rescató un ejemplar de gavilán acanelado (Parabuteo unicinctus), un gavilán sabanero (Buteogallus meridionalis) y un tordo de matorral (Dives warszewiczi) que se encontraban amarrados a las afueras de un parque en el distrito de Chongoyape, en el departamento de Lambayeque.
Los tres especímenes fueron atendidos por los especialistas de la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre (ATFFS) de Lambayeque, quienes les brindaron los primeros cuidados para hidratarlos y alimentarlos. Si bien se encuentran en aparente buen estado de salud, uno de los gavilanes tiene cortadas las plumas de las alas, lo que le impide volar.
Tal como se constató en presencia de la PNP, los gavilanes estaban amarrados con una soga y expuestos al sol en un parque ubicado en el caserío Juana Ríos, donde eran utilizados por los dueños de una bodega como un atractivo para recibir compradores pues las personas se tomaban fotos junto a las aves.
Además, se obtuvo información de que uno de los gavilanes habría sido empleado para brindar servicio como controlador biológico sin contar con la autorización correspondiente. Esta actividad implica usar aves de presa para controlar de manera natural aves menores que afectan los cultivos agrícolas.
Ante esta situación, personal del SERFOR procedió a la incautación de los especímenes y recabó toda la información necesaria para iniciar el procedimiento administrativo sancionador contra la propietaria del establecimiento, quien no contaba con ningún documento que sustente la procedencia legal de estas especies que mantuvo en cautiverio por cerca de un año.
Asimismo, se viene realizando las coordinaciones para reubicar a las aves en un centro de cría autorizado por el SERFOR, donde continuarán recibiendo los cuidados necesarios para su desarrollo. Finalmente, el caso fue informado a la Fiscalía Especializada en Material Ambiental (FEMA) de Lambayeque para que actúe en el marco de sus atribuciones.
La compra, venta, tenencia de especímenes, productos o subproductos de fauna silvestre de origen ilegal está considerada como una infracción muy grave, según el Reglamento de Infracciones y Sanciones en Materia Forestal y de Fauna Silvestre, cuya multa va de 0,1 UIT a 5000 UIT.
