Putin se reunirá con Hugo Chávez y Evo Morales
Por Juan Sheput
El primer ministro de Rusia, Vladimir Putin, visita Venezuela en donde sellará acuerdos comerciales petrolíferos por un monto de 20,000 millones de dólares. Es una alianza energética entonces, que se suma a otra, militar, pues como sabemos ya antes Rusia le ha vendido armas, aviones, tanques, a Venezuela por cerca de 4,000 millones de dólares. Por otro lado la presencia de asesores militares y multidisciplinarios de origen ruso en ciudades venezolanas nos dan la evidencia que Venezuela juega hoy el papel de socio estratégico en esta zona de América Latina, con mayor protagonismo que la misma Cuba.
El primer ministro de Rusia, Vladimir Putin, visita Venezuela en donde sellará acuerdos comerciales petrolíferos por un monto de 20,000 millones de dólares. Es una alianza energética entonces, que se suma a otra, militar, pues como sabemos ya antes Rusia le ha vendido armas, aviones, tanques, a Venezuela por cerca de 4,000 millones de dólares. Por otro lado la presencia de asesores militares y multidisciplinarios de origen ruso en ciudades venezolanas nos dan la evidencia que Venezuela juega hoy el papel de socio estratégico en esta zona de América Latina, con mayor protagonismo que la misma Cuba.
Vladimir Putin recuperó el sentido de la geopolítica para Rusia. Le devolvió el sentido de orgullo patriótico y autoestima, según analistas de Foreign Policy. Es en ese sentido que Rusia juega sus fichas, colocando cabeceras de playa en uno de los continentes más ricos del mundo en riquezas naturales: América Latina.
Los movimientos sociales que se ven en Venezuela, Ecuador, Bolivia y en menor escala en Argentina no tienen sentido sin la dirección rusa. De allí la necesidad de iniciar una discusión seria sobre este tema, que la clase política y mediática peruana reduce a una simple manipulación del humalismo por parte del chavismo venezolano. No es así señores. Aquí estamos viendo la presencia estratégica de una potencia que quiere volver a ser superpotencia y para ello requiere de socios estratégicos en el mundo.
El Perú, lamentablemente, por culpa de una clase política preocupada de cortoplacismos y oratoria demagógica, no discute seriamente geopolítica. No hay una conciencia de la importancia de nuestros bosques tropicales ni de nuestra provisión de agua dulce. Menos de protección de nuestra biodiversidad o extracción de recursos naturales. Hay un simplismo servil hacia la corrupción y el mercantilismo, posible por una ausencia de visión de largo plazo y carencia de sentido de estadista del presidente García. Todo se quiere rematar, el recurso fácil que permite caja para el presupuesto y "otros".
Vladimir Putin se encuentra en Venezuela donde se reunirá con Hugo Chávez. Luego hará lo propio con Evo Morales. En tanto en el Perú ni el presidente García ni una penosa cancillería se dan cuenta de este movimiento estratégico del ajedrez mundial.
Los movimientos sociales que se ven en Venezuela, Ecuador, Bolivia y en menor escala en Argentina no tienen sentido sin la dirección rusa. De allí la necesidad de iniciar una discusión seria sobre este tema, que la clase política y mediática peruana reduce a una simple manipulación del humalismo por parte del chavismo venezolano. No es así señores. Aquí estamos viendo la presencia estratégica de una potencia que quiere volver a ser superpotencia y para ello requiere de socios estratégicos en el mundo.
El Perú, lamentablemente, por culpa de una clase política preocupada de cortoplacismos y oratoria demagógica, no discute seriamente geopolítica. No hay una conciencia de la importancia de nuestros bosques tropicales ni de nuestra provisión de agua dulce. Menos de protección de nuestra biodiversidad o extracción de recursos naturales. Hay un simplismo servil hacia la corrupción y el mercantilismo, posible por una ausencia de visión de largo plazo y carencia de sentido de estadista del presidente García. Todo se quiere rematar, el recurso fácil que permite caja para el presupuesto y "otros".
Vladimir Putin se encuentra en Venezuela donde se reunirá con Hugo Chávez. Luego hará lo propio con Evo Morales. En tanto en el Perú ni el presidente García ni una penosa cancillería se dan cuenta de este movimiento estratégico del ajedrez mundial.