No podríamos haberlo dicho mejor. ¡Felicitaciones, Sr. Bentley!
Russel Bentley es soldado voluntario y periodista que apoya a los rebeldes prorrusos del Este de Ucrania
Por Russel ‘Texas’ Bentley
A mi familia y amigos y a toda la gente buena de los EE. UU.
Puede que Uds. no lo sepan, pero el mundo cambió el 1.o de marzo de 2018, día en que terminó una era y empezó otra. En gran medida, el significado que tenga esta era depende de Uds.
En ese día histórico Vladimir Putin reveló al mundo que las fuerzas armadas de EE. UU. son ahora obsoletas, y ya no pueden “proyectar poder” cometiendo crímenes de guerra o intimidando y destruyendo naciones pequeñas en todo el mundo. Sin embargo, la fuerza armada de EE. UU. aún puede cumplir a cabalidad la misión que necesita cumplir y que merece cumplir, cual es defender el territorio y el pueblo de los EE. UU. Uds. están seguros. No hay amenazas. Pero los días en que el gobierno de EE. UU. amenazaba a otros países y los destruía son ya cosa del pasado.
La revelación de Putin sobre las armas de ventaja cualitativa, contra las cuales la fuerza armada de EE. UU. está literalmente indefensa, no es amenaza ni fanfarronada. Solamente los mentirosos y tontos hablan de “agresión rusa”, y la estupidez de cualquiera que diga o crea que “Putin fanfarronea” es indescriptible. Las armas rusas son reales, y el complejo militar-industrial (sobre el que Dwight Eisenhower nos advirtió hace 57 años) no tiene absolutamente defensa alguna contra ellas. Pese a saquear y dilapidar literalmente trillones de dólares del tesoro de los EE. UU. y del pueblo de los EE. UU. en nombre de la “defensa”, están indefensos.
Las nuevas armas rusas no significan amenaza contra el pueblo de los EE. UU., a menos que Uds. permitan que la gente que se ha adueñado de Uds. y controla el gobierno inicie una guerra mundial y obligue a los rusos a usarlas. Pero si Uds. permiten que eso [la guerra] suceda, el pueblo de los EE. UU. recibirá lo que recibieron en 1945 los “buenos de los alemanes”. Y Uds. lo merecerían tanto como los alemanes. Por exactamente las mismas razones.
Rusia no es el enemigo de Uds. Solo busca cooperación para el beneficio de toda la humanidad. Pero desde la caída de la Unión Soviética, en 1990, hace 28 años, los EE. UU., la OTAN y la UE han procurado saquear el mundo. Ninguna persona que tenga sentido de la realidad puede poner esto en duda. No hay lugar al que los EE. UU. o la OTAN hayan entrado en las últimas cuatro décadas que esté mejor que antes de la agresión. Ninguno. En realidad, no hay lugar en que la OTAN o los EE. UU. hayan intervenido (por lo general violando el derecho internacional) que no se haya convertido en estado fallido, un infierno en la tierra para sus ciudadanos y un auténtico peligro para las regiones circundantes y el mundo. Son el gobierno de los EE. UU. y la OTAN, y la gente que se ha adueñado de ellos y los controlan, quienes son enemigos de la humanidad y una amenaza para ella. Pero desde el 1.o de marzo de 2018 ya se acabaron los días de desprecio al derecho internacional y de destrucción impune de las naciones más débiles.
El buen pueblo de los EE. UU. de América tiene ahora una enorme oportunidad y un enorme desafío. Rusia gasta menos de la décima parte de lo que gasta EE. UU. en fuerza armada y defensa, pero su fuerza armada y sus armas son superiores por donde se las mire. El desperdicio, la corrupción y la más abyecta venalidad del complejo militar industrial de los EE. UU. han malgastado billones de billones de dólares en sistemas de armas que ahora son prácticamente inútiles y que han dejado a la fuerza armada de EE. UU. y, por extensión, al pueblo de los EE. UU. indefensos ante el poder de las armas rusas, que se conciben y producen para que sean efectivas y no económicamente provechosas [para los corruptos]. La oportunidad es esta: los EE. UU. pueden reducir ahora su gasto militar (el mayor del mundo) en 90% y aun así estar más seguros que ahora, cuando gasta un trillón de dólares al año en armas inservibles y en una fuerza armada indefensa. Más seguros porque apenas el pueblo de los EE. UU. tome el control de su gobierno en la medida suficiente para reducir su presupuesto militar solo hasta el monto que gasta Rusia, este país dejará de tener motivos para ver a los EE. UU. como una amenaza existencial. Cuanto menos gastemos, más seguros estaremos. Cuanto más se gaste, más probable será la Tercera Guerra Mundial, que verá a los EE. UU. como instigadores y perdedores. Este cambio daría a los EE. UU., a partir del momento en que Uds. lo decidan, unos 800 billones extra, para gastar en cosas que tienen valor real, que Uds. realmente necesitan. Servicios gratuitos de salud, educación superior gratuita, arreglo de la decadente y podrida economía e infraestructura, que cada día que pasa se convierte para el pueblo de EE. UU. en una amenaza mayor que Rusia.
El reto por delante es erradicar una cleptocracia despiadada y de raíces profundas, que se ha desarrollado a partir del engaño y la opresión y que está enceguecida en su afán de ir a la guerra y que no se detiene ante nada para conservar su poder. Es una tarea inmensa, una tarea histórica, pero en ella radica la única esperanza del pueblo de los EE. UU. Debemos poner freno a estos parásitos, y si el pueblo no está a la altura del reto, si no cumple su misión histórica, estarán dejando su cumplimiento a los ejércitos del mundo con Rusia a la cabeza, que ya no tolerarán a los que quieren gobernar el mundo. Los dirigentes políticos de EE. UU. están llevando al pueblo a una guerra que no podrán ganar, una guerra de la cual Uds., ciudadanos y sus familias, no podrán recuperarse. Si el pueblo de los EE. UU. no impide que sus gobernantes desaten la Tercera Guerra Mundial, habrá guerra. Paz y prosperidad, o muerte y desolación son las únicas opciones que quedan por escoger; y ahora es el momento de elegir y actuar en consecuencia.
Son $ 800 billones anuales caídos del cielo, tuyos con solo estirar el brazo, si tienes la sabiduría, el coraje y la determinación de recuperarlos de los charlatanes y estafadores que durante años han estado robando y dilapidando miles de billones de dólares. Estos gusanos claman ahora que la única solución es darles más dinero, como si los que fracasan pese a tener 10 veces más fondos que sus competidores [rusos] pudieran tener éxito si la proporción del gasto fuese de 20 a uno. En algún momento el huésped debe deshacerse de sus parásitos, o arriesgarse a que le chupen toda la sangre.
Cuando el pueblo de los EE. UU. se ponga de pie ante sus opresores y se libere de sus parásitos, el pueblo de Rusia y del mundo estará con Uds., aplaudirá y apoyará. Toda la gente buena del mundo está del mismo lado. Los que te oprimen y explotan hacen lo mismo contra los demás. Los enemigos de Uds. son nuestros enemigos, y los de Uds. son los nuestros. Levántense, como lo hemos hecho, arrojen sus cadenas e ilusiones, miren por sí mismos quiénes son los enemigos y derrotémoslos juntos, antes de que destruyan el mundo y todo lo que tiene de bueno. Solamente Uds. pueden frenarlos sin que haya una guerra mundial. Si no lo hacen, habrá guerra y los enfrentaremos nosotros. Pero quienes viven en los EE. UU. sufrirán el destino de quienes desencadenan y pierden una guerra mundial. Es un destino que nadie desea.
América, te ha llegado la hora. La elección es dura y clara, y debes escoger pronto.
O bien sometes a la obediencia a tus gobernantes y detienes la guerra que están empeñados en desatar y cosechas los beneficios de frenar la más notoria y dispendiosa estafa de la historia, o bien no haces nada y dejas que tus parásitos te consuman, les dejas llevarte a ti y a tus hijos y a tu nación a un Armagedón y horrorosa muerte en una guerra que tú sabes que nunca podrás ganar. La elección es tuya. Y también la responsabilidad.
Traducción de Con nuestro Perú de
“A Texan in Ukraine to the American People - ‘Overthrow Your Kleptocratic Oppressors!’” en
Russia Insider, 10-03-2018 en
https://russia-insider.com/en/texan-ukraine-american-people-overthrow-your-kleptocratic-oppressors/ri22745
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