La representación en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) condenó este miércoles el asesinato del defensor de derechos humanos e indígenas de la etnia tzotzil Simón Pedro Pérez López, ocurrido en Chiapas (sureste), y llamó a las autoridades mexicanas a investigar la posible vinculación con su trabajo de denuncia de la violencia y hacerlo con perspectiva multicultural.
 
 

Simon Pedro Perez Lopez

 

 
"Resulta preocupante que el asesinato se haya producido pocos días después de que Simón Pedro denunciara ante las autoridades la situación de violencia y riesgo que enfrentan pobladores de la región de Los Altos de Chiapas (región montañosa) debido a la actividad de grupos criminales, y a la denuncia pública hecha por organizaciones de la sociedad civil al respecto", dijo en un comunicado Guillermo Fernández-Maldonado, representante del organismo que encabeza Michelle Bachelet.
 
El asesinato del dirigente conocido en las comunidades indígenas por su nombre de pila, Simón Pedro, "es otra trágica evidencia de como la violencia coarta el trabajo de quienes defienden los derechos humanos en el país", dice el posicionamiento del organismo internacional.
 
Acnud denuncia además, la "falta de atención por parte de las autoridades a denuncias de esta gravedad", que incumple con el deber de protección estatal.
 
Esa inacción de las autoridades mexicanas "sitúa en riesgo a las personas defensoras de derechos humanos y a las comunidades indígenas que se atreven a alzar la voz en este contexto de inseguridad", señala Fernández-Maldonado.
 
Acnudh pide además que las investigaciones se lleven a cabo de manera oportuna y transparente.
 
En particular pide que se tome en cuenta un enfoque multicultural atendiendo a la pertenencia de la víctima al pueblo tzotzil y analizando todas las líneas de investigación.
 
Ese enfoque debe observar "la posible vinculación de este asesinato con la labor de defensa de los derechos humanos que realizaba la víctima".
 
El organismo confirma las versiones de que el dirigente indígena fue asesinado el 5 de julio de 2021, cuando estaba acudiendo al mercado en el centro del municipio de Simojovel, Chiapas, de donde era originario y vivía con sus esposa y cuatro pequeños hijos, cuando un hombre que conducía una motocicleta le disparó causándole la muerte.
 
ZONA ASEDIADA POR LA VIOLENCIA
 
La representación permanente del organismo del sistema de derechos humanos de la ONU señala que la zona de los Altos de Chiapas es una de las más peligrosas en el país latinoamericano, región donde en 1994 estalló una rebelión indígena del autodenominado Ejército Zapatista de Liberación Nacional que encabezaba el Subcomandante Marcos.
 
"La zona sufre un contexto de alta violencia relacionada con la actividad de grupos criminales, la cual afecta particularmente a las comunidades indígenas que, por su vulnerabilidad e indefensión, enfrentan un mayor riesgo", señala Fernández-Maldonado.
 
Pérez López era líder de la comunidad Las Abejas de Acteal, una que el 22 de diciembre de 1997 sufrió una de las peores masacres en la historia mexicana cuando 45 mujeres, niños y ancianos que se refugiaron aterrorizados a rezar en una ermita huyendo de la violencia, fueron asesinados por paramilitares en la región montañosa del sureste
 
"Es por estas circunstancias que el señor Simón Pedro dedicaba su trabajo de defensa a la protección de las comunidades indígenas de la zona", indica Acnudh.
 
Además de haber presidido la mesa directiva de Las Abejas en 2020, Simón Pedro era catequista e integrante del Congreso Nacional Indígena, que reúne a las bases sociales que surgieron del zapatismo.
 
Como parte de su trabajo de defensa de los derechos humanos la víctima acompañaba a comunidades indígenas que denunciaban episodios de violencia.
 
Durante 2021, la ONU ha documentado siete casos de asesinatos de personas defensoras de derechos humanos donde la letal agresión podría ser una represalia por su legítima labor, aunque las organizaciones civiles reportan 14. 
 
 
Con información de Sputnik