El orden mundial existente comenzó a resquebrajarse en marzo de 1999, con el bombardeo estadounidense de Belgrado, y desde entonces los países europeos viven en medio de una crisis de seguridad, afirmó este viernes el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
"En aquel entonces esas bombas, además de matar civiles, comenzaron a destruir el sistema de relaciones internacionales. Fue en ese momento cuando los miembros de la OTAN, y cuando decimos miembros de la OTAN, queremos decir los estadounidenses, comenzaron a bombardear los cimientos del orden mundial. Y fue entonces cuando comenzó la erosión de todas las bases del orden mundial, lo que desencadenó la crisis de la seguridad europea que todos experimentamos en la actualidad", dijo Peskov.
El vocero destacó que Rusia, que forma parte de Europa, también se ve perjudicada por ese proceso, mientras el país norteamericano, que desencadenó la crisis, se somete en menor medida a sus consecuencias.
Peskov desmintió además las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien declaró la víspera que su homólogo ruso, Vladímir Putin, está tratando de destruir la OTAN y aseguró que "desde el principio esa fue su intención".
"Tuvimos un período romántico en las relaciones con la OTAN (...) Pero ese período romántico quedó en el pasado, y el romance fue reemplazado por la vida laboral de costumbre, por unas relaciones de rutina", recalcó el representante del presidente ruso.
Peskov recordó que la OTAN "fue creada y concebida como una herramienta de confrontación", funciones que sigue cumpliendo, y Rusia trata actualmente a la Alianza como mismo la trataba antes del "período romántico".
La víspera los líderes de la OTAN acordaron reforzar el flanco este del bloque con el despliegue de cuatro grupos de combate en Rumanía, Bulgaria, Hungría y Eslovaquia.
"Antes de esa decisión de fortalecer el flanco este de la OTAN, de hecho ya habían hecho ese esfuerzo. Allí se formó un puño muy fuerte, una poderosa infraestructura militar de la OTAN", recalcó el representante del Kremlin.
Peskov recordó que Putin, en respuesta a ese paso de la OTAN, le pidió al ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, que presentara propuestas para reforzar el flanco occidental de Rusia.
En opinión del portavoz, la iniciativa nunca partió de Moscú, fue la OTAN quien se acercó a las fronteras rusas, "creando de esa manera un peligro", así como "provocando la preocupación" de Rusia.
Moscú y Washington mantienen una pugna geopolítica por la aproximación de la OTAN a las fronteras de Rusia.
Las dos potencias iniciaron en enero negociaciones para sellar un acuerdo vinculante de garantías de seguridad.
Moscú exige la renuncia a la ampliación de la OTAN al este, se opone a la incorporación de Ucrania y Georgia, naciones que limitan con Rusia y en los que, tras una hipotética adhesión, EE. UU. podría emplazar sus misiles de ataque.
Rusia demanda también que el bloque militar retire sus tropas y material bélico de Bulgaria y Rumanía, lo que implica el retorno a la arquitectura militar que existía en Europa en 1997, cuando fue firmada el Acta Fundacional Rusia-OTAN.
EE. UU. tiene en la actualidad misiles desplegados en la localidad polaca de Redzikowo, a unos 180 kilómetros del enclave ruso de Kaliningrado, y en el poblado rumano de Deveselu, a unos 600 kilómetros de la península de Crimea."
Con información de Sputnik