El Reino Unido mantiene la ocupación de las islas Malvinas por sus recursos naturales y la proyección a la Antártida, dijo el viernes a la Agencia Sputnik el secretario argentino para esa jurisdicción, Guillermo Carmona.
"Es muy evidente que la presencia militar en Malvinas no solo busca los recursos de esa región sino el control del paso interoceánico y la proyección sobre la Antártida. En ese contexto, la lucha contra el colonialismo es una lucha común que compartimos con los países y pueblos que perciben que hay un factor disruptivo en el Atlántico Sur, que es la presencia militar, colonial y económica del Reino Unido a 14.000 kilómetros de Londres", afirmó Carmona.
Asimismo, opinó que el recuerdo de Malvinas debe trascender el conflicto armado de hace 40 años.
"La historia de Malvinas es una historia larga que no puede acotarse solo al conflicto, pero tampoco se puede abordar intentando omitir ese capítulo que fue la guerra", explicó el funcionario argentino.
Este 2 de abril se cumplen 40 años de la Guerra de Malvinas, el conflicto bélico desatado tras la respuesta militar británica a la incursión del ejército argentino, que reivindicó la soberanía del país en el suelo de la isla.
El enfrentamiento concluyó el 14 de junio con la rendición argentina, 649 soldados muertos por el país sudamericano y otros 255 del lado inglés.
Ambos países retomaron sus relaciones diplomáticas en febrero de 1990 en la administración del entonces presidente argentino Carlos Menem (1989-1999).
Carmona llamó a tener presente que, más allá de lo sucedido en 1982, "no se puede dejar de tener en cuenta la situación de usurpación que Argentina padeció desde 1833", fecha en que comenzó la ocupación británica de las islas.
Por eso, el secretario argentino para Malvinas considera que el 40 aniversario de la guerra debe servir para "renovar esa mirada sobre la historia larga de vinculación de Argentina con las islas y visibilizar la cuestión Malvinas como una causa nacional que nos vincula desde el nacimiento del país y por lo tanto tiene que ver con la identidad nacional".
Carmona destacó que con el Gobierno de Alberto Fernández, por primera vez, el Ejecutivo argentino logró centralizar en una misma secretaría de Estado "toda la acción de política exterior" relativa a las Islas Malvinas, la Antártida, donde el país mantiene un reclamo territorial de más de 1,4 millones de kilómetros cuadrados desde 1943, y el Atlántico Sur.
Para el funcionario, la unificación de las causas se explica porque "Malvinas, la Antártida y el Atlántico Sur son un trío estratégico para Argentina y para América Latina".
"No se puede concebir la disputa de soberanía en Malvinas sin tener en cuenta que está enclavada en el Atlántico Sur y que hay una serie de circunstancias a abordar en un contexto de presencia ilegítima británica", agregó.
En cuanto al reclamo argentino contra la ocupación británica de las islas, Carmona opinó que podría encontrar mayor eco en un mundo cada vez más multipolar, en el cual potencias como China o Rusia contraponen a una hegemonía en decadencia de EEUU, tradicional aliado del Reino Unido.
"La tendencia a la multipolaridad no tiene que ver con los deseos, tiene que ver con la realidad", sentenció el funcionario, señalando que el paso de los años hizo caer aquella "visión unipolar que se promovía desde algunos análisis en el final de la Guerra Fría".
En su reforma de 1994, la Constitución argentina incorporó, en su Disposición Transitoria Primera, el reconocimiento expreso de que "la Nación Argentina ratifica su legítima e imprescriptible soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes".
Sin embargo, no fue hasta 2013, durante el segundo Gobierno de Cristina Fernández (2011-2015), que la Cancillería creó una dependencia específica para centralizar todas las acciones en materia de política exterior destinadas a mantener firme un reclamo que atraviesa a todos los argentinos: la Secretaría de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur.
A pesar de eso, la secretaría fue disuelta durante la gestión del presidente Mauricio Macri (2015-2019) y renació recién en 2019 con la asunción de Alberto Fernández.
Con información de Sputnik