Perú sufre de déficit de 102 mil unidades de sangre
Afecta a víctimas de accidentes de tránsito, gestantes y personas que van a ser operadas.
Este martes 14 se conmemora el “Día Mundial del Donante de Sangre”.
En el Perú, de las 300 mil unidades de sangre que se debieran recaudar anualmente, sólo se captan 198 mil, habiendo un déficit de 102 mil unidades, afectando principalmente a las víctimas de accidentes de tránsito, gestantes y personas que van a ser operadas, así lo informó el Dr. Nolberto Quezada, coordinador del Programa Nacional de Hemoterapia y Bancos de Sangre (Pronahebas).
El especialista llamó la atención de este tema, pues en el caso de las gestantes la falta de donantes se traduce en consecuencias trágicas como las muertes maternas por hemorragias. “A pesar de que las muertes maternas han disminuido, un gran porcentaje (40%) se debe a las hemorragias, y esto es en gran medida debido a la falta de sangre y sus derivados”, señaló.
Nolberto Quezada también dio a conocer que otro problema que ocasiona la falta de donantes de sangre es el rechazo o postergación de las intervenciones quirúrgicas, perjudicando la salud de los pacientes.
“Las unidades de sangre, elemento básico para salvar la vida de miles de pacientes que diariamente son víctimas de accidentes de tránsito, sufren de alguna enfermedad o son madres parturientas con hemorragias, son altamente escasas en el Perú, convirtiéndolo en el país de más baja donación voluntaria dentro de América Latina”, refirió.
Por ello, en el marco del “Día Mundial del Donante de Sangre” que se celebra el 14 de junio y que este año tendrá como lema “Buscando héroes… más donantes de sangre más vidas sanas”, se fortalecerá la campaña de difusión y captación de donantes de sangre en todo el país.
Falta de cultura de donación voluntaria
El coordinador del Pronahebas manifestó que la falta de cultura de donación voluntaria de sangre coloca al Perú debajo de países como Bolivia y Ecuador, y esto se debe entre otras cosas en que las personas siguen creyendo en los mitos, lo que influye en su decisión de donar sangre.
“Lo que tradicionalmente ha venido sucediendo es que ante los escasos recursos de los bancos de sangre se recurre a los familiares y amigos y hasta se compran las unidades. Este mecanismo tiene que cambiar para poder contar con un stock de sangre que sirva para las emergencias”, señaló.
Explicó que si los peruanos donáramos de dos a tres veces al año, se lograría satisfacer la demanda y se podría atender los pacientes con cáncer, aquellos que han sufrido quemaduras y a las víctimas de accidentes de tránsito entre otros.
“En los países desarrollados sólo se obtiene sangre por vía altruista mientras que en África se han realizado importantes campañas para captar a los más jóvenes y así tener material seguro, situación que queremos repetir en nuestro país y que ya estamos desarrollando”, aseguró.
La práctica de reclutar a la población más joven para que entregue su sangre en forma habitual ha dado buenos resultados en muchos países, es por eso que en el Perú el Minsa está poniendo en práctica esta modalidad de gestión.