Advierten sobre peligro del abuso de antibióticos y antihistamínicos por resfrios otoñales
Especialistas de la Digemid brindan recomendaciones.
Pueden ocasionar excesiva somnolencia, dolores de cabeza, mareos y hasta problemas al corazón.
Durante el otoño las bajas temperaturas y alta humedad característica de la ciudad de Lima promueven la aparición de más casos de infecciones respiratorias agudas (IRAs) en la población, promoviendo que ellos opten por automedicarse con antibióticos y antihistamínicos, desconociendo que ello puede ocasionarles daños a la salud.
Así lo advirtió el especialista de la Dirección General de Medicamentos, insumos y Drogas (Digemid), Aldo Álvarez Risco, quien explicó que el uso de antibióticos, como la Amoxicilina, cuando no son necesarios y en dosis excesiva puede ocasionar que el paciente se vuelve inmune a sus propiedades terapéuticas en el futuro.
“Cuando uno frecuentemente recurre a antibióticos sin evaluación médica puede desarrollar la resistencia bacteriana o incapacidad de asimilar los beneficios terapéuticos del medicamento que usó antes, requiriendo para curarse otros fármacos de mayor potencia y más costosos”, señaló.
El especialista recordó que es falso que todas las infecciones respiratorias requieren de antibióticos, pues el 60% de éste tipo de casos son virales y las molestias desaparecen luego de tres días.
“El único cuidado que requieren estos pacientes es la ingesta de líquidos calientes y un adecuado abrigo”, dijo.
Además, si nos referimos a una infección respiratoria bacteriana, no siempre el medicamento más potente y de última generación es el mejor para recuperar la salud del enfermo, precisó Álvarez, ya que más bien su uso podría ser contraproducente ya que contribuye a desarrollar la resistencia bacteriana antes mencionada.
Por otro lado, el experto explicó que los antihistamínicos; fármaco contra la alergia como la Clorfenamina que también suele usarse ante algunas infecciones respiratorias, como resfríos con estornudos constantes, no deben usarse en forma indiscriminada pues puede ocasionar excesiva somnolencia, dolores de cabeza, mareos y taquicardia. Mientras que en el caso de antibióticos, el paciente puede ser víctima de intoxicaciones intestinales.
“Ante alguna infección respiratoria, las personas suelen abusar de ambos medicamentos a la vez, lo que es perjudicial. Primero porque evitan un diagnóstico preciso del tipo de IRA que le afecta, además su infección se puede volver crónica y pueden padecer de reacciones adversas por estos fármacos”, refirió.
Los padres de niños que padecen de alguna infección respiratoria no deben suministrarle por ningún motivo algún antihistamínico, ni en jarabes o pastillas, porque son más propensos a sufrir alguno de estos peligros.
Niños y ancianos son los más vulnerables
Alvarez recordó que la población infantil y las personas de la tercera edad son los más vulnerables a padecer de algún daño a la salud por el uso inadecuado o abuso de antibióticos y antihistamínicos.
“En el caso de los niños y ancianos la composición de su masa muscular, estructura ósea y el funcionamiento de su sistema digestivo, son diferentes a un joven o persona adulta y por ello requieren un tratamiento con medicamentos en dosis diferentes para que no los perjudiquen”, acotó.
Recomendación
Finalmente, el experto recomendó a las personas evitar automedicarse con estos fármacos y de padecer alguna infección respiratoria por más de tres días acudir al centro de salud más cercano para obtener un adecuado tratamiento farmacológico en dosis y periodos de tiempo adecuado para cada organismo.