Tartamudez genera inseguridad, timidez y retraimiento
Especialistas señalan que corregir continuamente empeora problema.
Hospital Víctor Larco Herrera tiene programa integral de atención.
Problemas psicológicos como inseguridad, timidez y retraimiento, son algunas de las consecuencias de la tartamudez, la cual es uno de los trastornos del habla más frecuentes que afectan a nuestra población infantil.
Este problema puede verse agravado por la presión de la familia, amigos y maestros del menor afectado, señaló Giovanny Rivera Ramírez, jefa del Departamento de Niños y Adolescentes del Hospital Víctor Larco Herrera del Ministerio de Salud (Minsa).
La especialista agregó que la dificultad se agudiza cuando los familiares corrigen continuamente al menor, ocasionándole mayor estrés y temor a equivocarse, lo que genera un aumento del síntoma, es decir, empeora la tartamudez.
Rivera señaló que los esfuerzos por hablar y el estrés del crecimiento pueden desencadenar las primeras repeticiones, dudas y sonidos que caracterizan la temprana aparición de tartamudez.
Los primeros síntomas de problemas en el lenguaje generan en los niños tensión, vergüenza, susto o frustración.
“La Disfémia o tartamudez es la interrupción de la fluidez del habla, varía dependiendo de quien la padece. Esto puede ser acompañado con movimientos de alguna parte de la cara o gesticulación excesiva”, explicó la psiquiatra.
Programa en Larco Herrera
En el Departamento de Psiquiatría del Niño y Adolescente del Hospital Víctor Larco Herrera se evalúa, diagnostica y trata al paciente de manera integral, incluyendo la asistencia psiquiátrica y psicológica para aprender a manejar las situaciones de ansiedad y frustración. Además, las terapias físicas y de lenguaje para relajar los músculos de la cara y evitar las contracturas.
Según la especialista, el tratamiento se realiza con la familia para proveer al menor de un ambiente estable y afectuoso, como soporte emocional. “De acuerdo a cada caso, nosotros asistimos a los niños a fin de que tenga una terapia física y psicológica. El promedio de tratamiento es de un año, durante el cual el niño asiste a una o dos veces por semana”, detalló.
Los genetistas han encontrado que existe una susceptibilidad familiar a la tartamudez, la cual afecta más a niños que a niñas (en relación de 4 a 1). Dato: Las atenciones médicas para este problema se brindan en el Hospital Larco Herrera, Jr. Raimondi cuadra 5, Magdalena del Mar.
Para citas se puede llamar al teléfono 261-5516, Anexos 1101 y 1058