Alcohol es responsable de la disminución del sistema inmunitario.
Bebedores tienen una alta tasa de mortalidad.
Las personas que consumen alcohol están expuestas a adquirir neumonía, lo cual se debe a que los cilios (vellosidad) respiratorios, encargados de la limpieza de las vías aéreas, paralizan su función a causa del licor que se ha bebido, lo que facilita la contaminación de los pulmones con bacterias y virus.
Al respecto, el neumólogo Óscar Gayoso Cervantes, del Hospital Cayetano Heredia, detalló que el consumo de bebidas alcohólicas también impide la eliminación de las secreciones. “Una persona que ingiere alcohol no come y tampoco toma líquidos de manera saludable, por lo cual está deshidratada, lo que no favorece la eliminación de secreciones pulmonares”, agregó.
El especialista también detalló que se ha encontrado en las personas que consumen alcohol gérmenes como los anaerobios y los gram negativos (bacterias causantes de males respiratorios). Señaló también que el 30% de este tipo de pacientes atendidos en el hospital requieren de hospitalización, incluso muchos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). “Los afectados tienen una alta tasa de mortalidad”, indicó.
Síntomas
Este tipo de neumonía presenta fiebre, dificultad para respirar, tos y expectoración de color amarillo verdosa. Además, es frecuente que sufra problemas con su estado de conciencia (desde somnolencia hasta el coma).
Recomendaciones
Para prevenir ésta enfermedad Gayoso Cervantes recomendó evitar conductas de riesgo que conducen a infecciones, como el consumo de alcohol y tabaco. Exhortó igualmente, a mantener una alimentación balanceada donde se presente mayor consumo de proteínas de buena calidad y bajo costo, como el pescado.
“La vacunación es importante en personas en riesgo (niños y ancianos). En la actualidad el esquema de vacunación del Ministerio de Salud incluye la vacuna contra la influenza y neumococo que deben ser aprovechadas por nuestra población”, recomendó el especialista.
Ante los primeros síntomas, las personas deben acercarse al establecimiento de salud más cercano. Se debe cumplir con el tratamiento prescrito por el médico y se debe evitar la automedicación. “El uso indiscriminado de antibióticos genera resistencia en los gérmenes, los cuales en el futuro darán problemas graves y de alto costo”, explicó el neumólogo.