Insultos son el primer signo de alerta
Cuando comienzan a existir discusiones con insultos verbales es el momento de evaluar la relación y en todo caso ponerse en manos de consejeros matrimoniales o terapeutas de pareja para tratar de resolver los problemas, superar los malos momentos, y no esperar que lleguen las agresiones físicas pues con facilidad se puede perder el control y ocurrir una fatalidad, señaló el Dr. Carlos Bromley Coloma, director de Salud Mental del Ministerio de Salud (Minsa).
Explicó que las discrepancias e incompatibilidades mal llevadas conducen finalmente a la ruptura de la relación y esta es planteada y ejecutada, tanto por la mujer como por el hombre, con una carga de emociones intensas. “No hay que olvidar que en todos los casos, la complacencia nos convierte en cómplices de la agresión y del agresor”, alertó.
Comentó que el planteamiento de una ruptura no siempre es aceptado adecuadamente, hay negativas e incluso se implementan formas para evitarla, que pasan por el ruego y la súplica (sin ti no sé cómo vivir por favor, reconsidera, etc.), la adulación (eres lo mejor que he tenido, reconsidera, etc.), la agresión verbal (insultos, descalificaciones, etc.), y finalmente al no conseguir revertir la ruptura ocurre la violencia física como respuesta (si no eres para mí, no lo serás para nadie), y de los golpes se pasa al asesinato.
El proceso no debe llegar a ese extremo y esto generalmente sucede porque se cree que la persona a quien cancelamos la relación lo va a aceptar sin mayor problema y no se tiene en cuenta su frustración, su poca tolerancia a decisiones que no concuerdan con lo que quiere y finalmente no reflexionamos sobre lo que podría estar pensando frente a la ruptura, agregó.
Bromley Coloma recordó que entre enero y noviembre del 2013 se reportaron en el país 119 casos de feminicidio y 136 tentativas de feminicidio, siendo las cifras altas que requieren atención urgente al problema con la participación directa de las parejas involucradas.
Asimismo, manifestó que en el Minsa, los establecimientos de salud brindan atención para casos de maltrato y violencia en los 190 módulos de atención de salud mental en todo el país. “La mejor alternativa no es esperar que los problemas de pareja se resuelvan solos, esto no ocurre, es necesario acudir al apoyo profesional”, finalizó.