No sirven para un bronceado saludable ni protegen contra efectos negativos del sol. La Digemid recomienda usar solo productos reconocidos que contengan óxido de zinc
Es equivocada la idea de que los bronceadores caseros impiden el ingreso de los rayos ultravioleta y su uso protege contra la radiación solar, que se usan para ahorrar unos soles. Por el contrario, podrían sufrir en el futuro lamentables consecuencias como melanomas o algún tipo de cáncer de piel, advirtieron especialistas de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid).
“Los bronceadores caseros se preparan por lo general con jugo de zanahoria o de limón, aceite de oliva, germen de trigo y hasta con gaseosas de color oscuro, sustancias que no ofrecen ningún tipo de protección a la piel, por lo que exponerse a los rayos del sol teniendo como única defensa estos preparados es muy peligroso, porque no impiden el paso de los rayos ultravioleta”, explicaron especialistas de la Digemid.
Detallaron que las consecuencias pueden ser inmediatas con enrojecimiento y quemaduras en la piel, o de largo plazo, con la aparición de melanomas o diversos tipos de cáncer de piel.
“Los bronceadores caseros tampoco garantizan un buen bronceado y a la larga el supuesto ahorro de dinero no es tal, debido a que las personas afectadas deberán invertir en algún tipo de tratamiento según el efecto que haya ocasionado la exposición al sol con estos preparados que no protegen la piel”, enfatizaron.
Recomendaciones
Los especialistas de la Digemid recomendaron a la población que, en lugar de recurrir a este tipo de productos, utilicen bronceadores reconocidos, que cuenten con autorización a través de su Notificación Sanitaria Obligatoria (NSO) y que entre sus componentes tenga óxido de zinc.
“El óxido de zinc es un filtro solar físico que previene las quemaduras y los cambios degenerativos de la piel causados por los rayos ultravioleta, pero esto no basta para proteger la piel, porque debemos repetir la aplicación del bronceador luego de un baño prolongado en el mar o piscina, o cada dos o tres horas, pues con el sudor el bronceador se desvanece”, explicaron.
Los especialistas de la Digemid recomendaron evitar una prolongada exposición al sol, no hacerlo entre las 10:00 y 14:00 horas (es cuando los rayos ultravioleta son más peligrosos) y protegerse usando ropa apropiada, anteojos con filtros adecuados y sombreros que protejan el rostro.
“Se debe agregar el consumo de dos y tres litros de agua al día y gran cantidad de frutas y verduras. No olvidemos que el consumo de líquidos, específicamente agua, es fundamental y necesario para mantener el cuerpo hidratado que ayudará a evitar descompensaciones y calambres al nadar o realizar una actividad física”, concluyeron.
Dato
Es de lamentar que muchas recetas de los bronceadores caseros se pueden encontrar en internet sin advertencia alguna sobre los riesgos que su uso implica para la salud de las personas.