Así como la falta de agua puede ser perjudicial para los seres humanos, beberla en exceso también puede ser dañino para la salud y hasta la muerte, indica el doctor Mark Whiteley en un artículo del Daily Mail.
Whiteley señala que beber más agua de lo que necesitamos puede hacernos sudar excesivamente y al no encontrarse otra solución algunos recurren a la extirpación de las glándulas sudoríparas.
Este exceso, en especial al final del día, puede interrumpir el sueño, pues cuando nos dormimos, el cerebro libera ADH, hormona antidiurética, para frenar la función renal y para que dejemos de sentir la necesidad de orinar durante la noche. Pero si tomamos dos o tres vasos de agua antes de acostarnos, es probable que el exceso de líquido anule el efecto de la ADH, llene la vejiga, y debamos levantarnos para la función de micción y a veces puede resultar difícil volver a dormir después de esto.
Muerte
Cita que se han dado varios casos en el mundo de personas que murieron por beber agua en exceso, porque puede causar estragos en el delicado equilibrio de sales en el cuerpo, indica el doctor Frankie Phillips, de la Asociación Británica de Dietética.
Tomar agua en exceso en corto de tiempo puede impedir que los riñones eliminen ese exceso del cuerpo al mismo ritmo, por lo cual la sangre se torna más ligera de lo normal, con muy bajas concentraciones de sal. Como consecuencia de esta calidad de sangre, las células, en especial las cerebrales, se hinchan y pueden causar presión en el cráneo, lo que llevaría a dolores de cabeza, y en casos graves, a una hiponatremia o intoxicación por agua, que puede ser fatal", advierte Philllips.
La cantidad adecuada de agua necesaria por persona varía y es directamente proporcional al peso o tamaño, el tipo de trabajo y el clima, deesta forma: A mayor tamaño o peso, más agua, a mayor actividad física, más agua, y a mayor calor, más agua.