Madrid, 26 mar (Sputnik). – El consumo de alcohol, tabaco y cannabis descendió en España tras la llegada de la pandemia de covid-19, mientras que el uso de tranquilizantes aumentó, según refleja un estudio realizado por el Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones.
"Disminuyó el consumo de bebidas alcohólicas porque teníamos cerrado todo el canal de restauración y hostelería, por tanto el consumo global en realidad bajo, aunque la compra en supermercados se incrementara", explicó en rueda de prensa Joan Ramón Villalbí, delegado del Plan Nacional sobre Drogas.
Según este estudio —realizado a través de 9.000 encuestas telefónicas entre noviembre y diciembre— antes de la pandemia un 62 por ciento de los españoles admitían ser consumidores de alcohol, una cifra que ahora desciende hasta el 57,3 por ciento.
El descenso es más acuciado en los jóvenes menores de 25 años, pasando del 73,1 por ciento al 64,6 en el caso de los hombres, y del 71,3 por ciento al 58,4 por ciento entre las mujeres
Más allá del descenso generalizado del consumo de alcohol, destaca la caída de las grandes borracheras: la prevalencia de intoxicaciones etílicas cae del 17,2 por ciento antes de la pandemia a un 9,7 por ciento actual.
En cuanto al tabaco, un 29,1 por ciento de los españoles eran fumadores antes de la pandemia, un porcentaje que ahora cae ligeramente, hasta situarse en el 27,7 por ciento.
El cannabis sigue siendo la droga ilegal más consumida en España, aunque su prevalencia de uso también cae, pasando de un 7,8 por ciento antes de la pandemia a un 6,5 por ciento.
El consumo de cocaína, relativamente poco frecuente, también presenta una disminución durante la pandemia, pasando del 1,4 al 1 por ciento.
En cambio, aumenta el consumo de hipnosedantes sin receta. Antes de la pandemia un 1,9 por ciento de los españoles admitían su uso, mientras que ahora lo hace un 3,1.
Aunque la encuesta no indaga sobre las causas, un reciente estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) certificó que más de la mitad de los españoles sufrieron problemas de sueño, tristeza o depresión en la pandemia, lo que podría estar relacionado con el mayor uso de sedantes.
Finalmente, el estudio presentado este viernes refleja también un aumento en el uso diario de internet entre los españoles, con una media que pasa de 2,5 a 3,5 horas diarias frente a la pantalla. (Sputnik)