La abominable conciencia acrítica
La abominable conciencia acrítica
por Herbert Mujica Rojas
3-7-2006
El fatalismo de la vida peruana se acentúa desde los medios de comunicación cuando se “borreguiza” el mensaje y se da por hecho lo que son abominables y aberrantes prácticas que una conciencia acrítica, profundamente enraizada en el espíritu nacional, no cuestiona, toma como parte de su medio ambiente y asimila con la consabida sentencia infeliz: “así son las cosas”. Se lee que un pobre diablo gana el equivalente de US$ 5 mil en el actual gobierno y emerge automáticamente la pseudojustificación: ¿debería cobrar menos? No se dice que es el mal utilizado dinero del pueblo.
por Herbert Mujica Rojas
3-7-2006
El fatalismo de la vida peruana se acentúa desde los medios de comunicación cuando se “borreguiza” el mensaje y se da por hecho lo que son abominables y aberrantes prácticas que una conciencia acrítica, profundamente enraizada en el espíritu nacional, no cuestiona, toma como parte de su medio ambiente y asimila con la consabida sentencia infeliz: “así son las cosas”. Se lee que un pobre diablo gana el equivalente de US$ 5 mil en el actual gobierno y emerge automáticamente la pseudojustificación: ¿debería cobrar menos? No se dice que es el mal utilizado dinero del pueblo.