Por Carlos Garrido Chalén

Frecuencia Latina tuvo gran éxito con su serie 'La Gran Sangre IV', en la que uno de sus protagonistas dirigiéndose a un enemigo implícitamente identificado decía: “Que se cuiden los malditos”. Y esa frase terminante, provocadora, pero también puntual, pienso que debería ser usada como paradigma, distintivo y sentencia legal de la nueva lucha contra el fenómeno de la corrupción que agobia y desangra a nuestro país y al mundo.

Por Raúl Allain (*)

Tradicionalmente se ha definido como el “analfabetismo funcional” a aquella situación en que las personas que saben leer no utilizan esta capacidad, ya sea en la lectura o en la escritura. De allí la vigencia del viejo aforismo: “No hay peor analfabeto que aquel que sabiendo leer no lee”.

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Por Milcíades Ruiz

Se abrió el telón y en el escenario aparecieron en sesión plenaria, todos los lavanderos (de activos) afiliados a la Confederación Interpartidaria de Mafiosos-COIMA. El primero en hablar fue un japonés en su condición de ex presidente genocida que, tras las ejecuciones extrajudiciales de niños, estudiantes, mujeres y ancianos como represalia anti subversiva alegó: “Soy inocente”.

“No soy la señora K” dijo la hija. “¡Que quede bien claro! Fuerza Popular no ha recibido dinero de Odebrecht”. Intervino entonces el expresidente “Feli-pillo” para decir: “Oiga …… ¡No soy corrupto! Que me muestren una prueba, uuu…na, y me retiro de la política”. Le tocó el turno al expresidente indultador de narcotraficantes que muy orondamente dijo: “La corrupción no está en mi”. “Otros se venden. Yo no”.

Por Jans Cavero*

El 10 de abril de 2019 el Poder Ejecutivo presentó al Congreso 12 proyectos de ley de reforma política, cuyo debate ha sido postergado por la Comisión de Constitución. Es evidente que para el fujimorismo y el moribundo partido aprista la reforma política no es prioritaria, porque no satisface sus intereses particulares. Presumo que en las elecciones próximas no habrá bancada aprista, salvo que se aúpen al fujimorismo o a alguno de esos vientres de alquiler que en cada elección postulan a impresentables.

La tarde del pasado viernes 19 de abril, mientras muchos probablemente tomaban un descanso por los días feriados de Semana Santa, se producía un incendio de proporciones en el cercado de Lima, el cual movilizó a una importante cantidad de bomberos que tuvo grandes dificultades para llegar al lugar del siniestro debido a las características de la zona en la que se producía. En horas de la noche del mismo Viernes Santo, se informaba que el incendio estaba fuera de control y se requería la participación de todas las unidades de bomberos de Lima y Callao. Luego de una ardua labor, se confirmó que el siniestro venía siendo controlado y se contó en el lugar con la presencia no solo del alcalde metropolitano, Jorge Muñoz, sino también del presidente Martín Vizcarra, y los ministros del Interior y Salud quienes brindaron sus declaraciones manifestando preocupación por lo sucedido. Si bien este hecho no cobró vidas humanas, los primeros momentos hicieron recordar la tragedia ocurrida en la misma zona hace 18 años, cuando en un gran incendio perdieron la vida 267 personas según cifras oficiales, demostrando el alto nivel de vulnerabilidad y poca preparación por parte de todos los ciudadanos para enfrentar los peligros que se pueden producir por la falta de implementación de medidas mínimas de seguridad.

Por Alfredo Palacios Dongo

El último Monitoreo de Cultivos de Coca publicado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (diciembre 2018) registró un aumento del área de cultivos ilegales de coca en 14% llegando a registrarse 49,900 hectáreas incrementándose éstos en las 13 zonas evaluadas siendo las más afectadas Pichis, Palcazú, Pachitea, San Gabán, y el Vraem que registra 21,646 hectáreas (67% de la producción total y la más alta productividad), también se incrementó la producción de hoja de coca seca, principal insumo para producción de cocaína.

Hoja de coca seca, principal insumo para producir cocaína

Por Raúl Allain (*)

Desde la aparición del ser humano en la prehistoria, toda su energía ha estado dedicada a sobrevivir y a buscar los medios para dominar el mundo, controlar las fuerzas de la naturaleza y trascender más allá de esta vida, incluso más allá de la muerte, tal como lo demuestra el delicado arte funerario presente en las culturas ancestrales, por ejemplo en el Perú o en Egipto.