Un estudio realizado en la Universidad de Verona, Italia, señala que el café expreso, una forma de café pasado, podría prevenir el mal de Alzhéimer al evitar la formación de las llamadas marañas de fibrillas, que pueden ser tóxicas y se cree que son causantes de dicho mal.
Aunque los mecanismos exactos que causan el Alzheimer y la demencia aún no están claros, se cree que una proteína llamada tau juega un papel importante.
En personas sanas, las proteínas tau ayudan a estabilizar las estructuras del cerebro, pero estas proteínas pueden agruparse en estructuras similares a hilos llamadas fibrillas.
Algunos investigadores creen que prevenir esta formación podría aliviar los síntomas de la enfermedad de Alzheimer o, en primer lugar, evitar que se desarrolle.
Mariapina D'Onofrio, bióloga de la Universidad de Verona, Italia, explicó que el café expreso se encuentra entre las bebidas más conocidas en todo el mundo, y beberlo se ha convertido en un hábito en muchos países debido a su agradable sabor.
Estudios recientes muestran que cuando se consume con moderación, esta bebida podría tener efectos beneficiosos para la salud humana gracias a sus propiedades biológicas.
Numerosos estudios informan que el consumo moderado y, a veces, incluso alto de café ejerce un efecto neuroprotector contra dos de las enfermedades neurodegenerativas más comunes: el Parkinson y el alzhéimer.
Para investigar, su equipo tomó raciones de expreso e incubó extractos junto con una forma abreviada de la proteína tau en un laboratorio por hasta 40 horas.
Descubrieron que a medida que aumentaba la concentración del extracto de expreso, las fibrillas de tau permanecían más cortas y no formaban marañas más grandes. Se determinó que estas fibrillas acortadas no eran tóxicas para las células humanas.
El equipo dijo que muchos de los compuestos del café, como la cafeína y la genisteína, pueden cruzar la barrera entre la sangre y el cerebro para generar efectos protectores.
Escribiendo en el Journal of Agricultural and Food Chemistry, el equipo indica que demostraron que la agregación de la proteína tau está modulada por el extracto de café expreso y algunos de sus componentes.
Basándose en la biodisponibilidad de los componentes del café en el cerebro y en los resultados del estudio, esperan que el consumo moderado de café proporcione una cantidad suficiente de moléculas bioactivas para actuar como moduladores de la agregación y toxicidad de la proteína tau.
En conclusión, presentan una gran cantidad de evidencia de que el café expreso, una bebida ampliamente consumida, es una fuente de compuestos naturales que muestran propiedades beneficiosas para mejorar las patologías relacionadas con tau.
Aunque se necesita mucha más investigación, el equipo dice que sus hallazgos preliminares podrían allanar el camino para encontrar o diseñar tratamientos para la enfermedad.
Los beneficios de beber el café están generalmente asociados al café pasado, pues otros estudios advierten que el café instantáneo, debido a la química de su proceso, produce efectos adversos, como incremento de la presión arterial y hasta contiene elementos cancerígenos.
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