Gane quien gane, la lucha continúa
Por Herbert Mujica Rojas
A no pocos peruanos, dentro y fuera del país, les afecta poco quién gane el próximo 5 de junio. El Estado les ignora, los omite o no los considera, por tanto, cada gobierno practica la casi bicentenaria costumbre de no agitar demasiado la casa, apañando, de ese modo, una corrupción que figura en el ADN social peruano desde los primeros días como nación independiente. Y si la hija del delincuente Alberto Fujimori, Keiko, se alza con la victoria, el cáncer atrabiliario pero letal de la inmoralidad, el robo organizado y la destrucción de cualquier vestigio de decencia, habrá consumado, una vez más, otra estafa al Perú.