Las denuncias de Juan Sotomayor podrían ser una mochila más par Keiko Fujimori

Por Ernesto Linares Mascaro

Una de las mejores experiencias de mi vida fue ser presidente de mesas en las elecciones del 2011. Grande fue mi sorpresa ver a dos personeros apristas en la primera vuelta: uno de ellos velaba por la candidatura al Congreso de Carlos Armas y el otro por la de Luis Negreiros, además que este último llevaba un conteo de los votos de la candidata presidencial Keiko Fujimori.

keiko fujimori bicicletada Callao 2016

Alan Garcia 231Herbert Mujica Rojas

La vanidad inconmensurable del señor Alan García Pérez acaba de fracasar en su pretensión a una tercera presidencia a la que nunca tuvo la más remota posibilidad. Que esté en 6.5% o algo así, acompasa muy bien con la salvadora medida del Jurado Nacional de Elecciones que plantea en 5% la valla electoral. Sin duda alguna la coincidencia es más o menos feliz.

vladimiro montesinos keiko fujimoriClaudia Cisneros


De Alberto a Keiko: El fujimorismo sigue pudriendo al país. Del pasado fujimorista y cómplice de Keiko hay pruebas: los estudios pagados con plata de los peruanos, su complicidad silente cuando su padre mandó torturar a su madre, su ocupación del cargo de primera dama de su madre cuando esta fue defenestrada por su padre, su silencio cómplice de las denuncias del robo de sus tíos (hasta hoy prófugos), su participación en la inconstitucional re-reelección de su padre, su defensa pública a Vladimiro Montesinos y más. Hasta allí, la mochila histórica de Keiko.

logo sodalicioHerbert Mujica Rojas

Los capitostes del Sodalicio ya deben saber que la suerte de Luis Fernando Figari está asociada a violaciones sexuales, acosos psicológicos, la ruina de proyectos de vida, infiernos que él y su grupo hizo padecer, durante largas décadas a jóvenes y que no hay atenuantes y por eso Alessandro Moroni anunció la condena a aquél, su solicitud de perdón y la “reorganización”. O sea, todos son santos e inmaculados porque el único rufián ha sido el fundador de la secta.

jneJoan Guimaray

El país está peligro. En peligro está el país. El retorno del Leviatán amenaza de nuevo al Perú. El regreso de épocas sombrías nos atemoriza otra vez a los peruanos decentes. La coyuntura electoral nos inquieta nuevamente. En tres períodos de gobierno no pudimos sacudirnos de la infame malatía. En tres lustros de administración no supimos enterrar la infección de la última década del pasado milenio. La incompetencia de nuestros gobernantes ha vuelto a resucitar con más fuerza el carcinoma de los años noventa. La mitomanía con mezcla de oligofrenia de uno, la cleptomanía con raudales de demagogia del otro y la traición con alta dosis de pusilanimidad e incapacidad del tercero, nos han vuelto a colocar en la cornisa de estas elecciones.

Mario Vargas Llosa 24(Una cuasi crítica de Pancho Pistolas)

Herbert Mujica Rojas

Creo que los 80 años le han caído a MVLL muy bien. Su última novela es casi auténticamente panfletaria...Oh horror! dirán algunos; porque no saben que el panfleto es un género literario respetabilísimo que existe desde los inicios de la humanidad. Panfleto es "La exageración de una verdad" mientras que Libelo es la "Exageración de una mentira" Así se juzga en el English Law; un Panfleto es libertario, por ende un derecho; mientras que un libelo es una difamación punible….Ahí radica la diferencia.

luis alberto salgado 2Luis Alberto Salgado T.

El doble rasero descarado empleado por Manuel Miranda, María Loayza y Edith Vargas (miembros del Jurado Electoral Especial Lima-Centro 1) para decidir que Keiko Fujimori no debe ser excluida del proceso electoral, constituye un flagrante acto de PREVARICATO (decidir contra derecho) y, eventualmente, deberán ser sancionados. El Jurado Nacional de Elecciones debe corregir con contundencia este despropósito jurídico de potencial grave consecuencia para el Perú.

huella eleccionesPor: Carlos Javier León Ugarte*

Es curiosa nuestra democracia. Principalmente los actores políticos y la opinión pública. Por un lado reclamamos y hasta exigimos partidos políticos más sólidos que estén fortalecidos en sus elecciones internas, que formen cuadros intensamente, que promuevan una militancia activa dinámica y participativa, y por otro lado cuando un ente sistémico anula las intenciones de un grupo de personas que se unen sin sentido democrático, sin ideas ni plataforma ideológica, sin elecciones internas, sin estatutos ni reglas, solo acondicionados a ver y hacer lo que ellos les plazca con tal de llegar al poder, entonces ponen el grito en el cielo.