Por Alejandro Sánchez-Aizcorbe

La edad de la inocencia se termina pronto. Vivo en los Estados Unidos desde 1997 y me siento agradecido por los beneficios de que mi familia y yo gozamos a cambio de nuestros conocimientos especializados. Asumo la responsabilidad de defender lo mucho de bueno que existe en estas tierras, que los chinos definen como “bello país”. Mi vecino de pared por medio es un endocrinólogo chino que se especializa en células madre. 

Por Herbert Mujica Rojas

Vi ayer en Canal N, muy campanudo, al Director General de Transporte Terrestre del MTC, abogado Paul Concha. Cuestionado por su familiaridad con una de las empresas licitantes, Salmón Corp., caminó por la verborragia burocrática para salir del paso. No obstante permanece la duda –o coincidencia- sobre sus favoritismos. Admitió que había sido director de esa firma hasta marzo del 2017 y que renunció. ¿Significa este quiebre, divorcio total o alejamiento radical con la firma en la que trabajara durante largos años?

Por Wilfredo Pérez Ruiz (*)

Hace dos semanas juramentó en el Palacio de Gobierno el equipo ministerial del jefe de Estado, Martín Vizcarra Cornejo, encabezado por el congresista y expresidente regional de San Martín, César Villanueva Arévalo. Dicho acontecimiento no ha pasado inadvertido debido a la singular omisión que inspiran esta nota.

Los provincianos más optimistas están viendo en Martín Vizcarra –recientemente juramentado Presidente del Perú– un personaje cuya gestión se ocupará con mayor detenimiento de las regiones del país y sus problemáticas específicas. Los gestos políticos que tuvo la primera semana de mando, nos dan una ligera esperanza de que así será. En el caso del sur –como en el resto del país– hay una serie de proyectos paralizados, y no hablamos de obras con pequeños impactos, sino de una agenda de proyectos postergada que dinamizaría la economía regional.

No será fácil evitar las discrepancias y promover la coherencia

Por Herberth Cuba

La designación del nuevo gabinete ministerial ha sido sorpresiva. Las diversas versiones mediáticas parece que obedecían a los deseos de introducir nombres en las designaciones, más que al afán de informar trascendidos veraces. El hermetismo con el que se manejó la información entre el presidente, el premier, los entrevistados y quienes al final fueron designados ha reafirmado, una vez más, que la gran política requiere estrategia, planificación y secreto. Nadie ha extrañado “la transparencia”, la “visibilización” ni la “previsibilidad”. En este contexto, se sobreentiende que han participado los líderes de los partidos políticos; sobre todo de aquellos partidos que pusieron su cuota de poder congresal para la renuncia del expresidente PPK.